El martes por la tarde, Yesica Vera fue estrangulada por su expareja y padre de sus dos hijos, Víctor Gabriel Rojas, en su domicilio de la localidad de Guernica, provincia de Buenos Aires. Ambos eran oriundos de Laguna Blanca y vivían allí hace más de seis años.

Mientras los chicos estaban en la escuela, Rojas ingresó a la vivienda de Yesica y la ahorcó con sus manos hasta dejarla sin vida. Tras consumar el femicidio, fue a la Comisaría de Guernica, donde confesó el hecho y se entregó a la justicia.

Según pudo saber La Mañana, por testimonios de la mejor amiga y madrina de los hijos de Yesica, camino a la Policía Rojas llamó a su hermana que reside en Laguna Blanca para contarle lo que hizo.

La víctima tenía 27 años, trabajaba como enfermera y estudiaba Psicología. Se separó de Rojas, de 32 años, hace tres meses porque sufría violencia de género. En ese momento, lo denunció y las autoridades judiciales determinaron la exclusión del hogar y una restricción perimetral para el femicida. Pero no sirvió de nada.

“Se separaron porque la última vez él le había pegado frente a los chicos. Ahí es donde ella hace la denuncia y le dan la perimetral”, relató la entrevistada.

Por su parte, Micaela, amiga de Yesica, señaló: “Ella hizo todo lo que la Justicia le pidió para conseguir la exclusión, la perimetral. Se lo concedieron a ella pero no a los hijos, aun declarando las agresiones que sufrió la última vez delante de los nenes: le sacó mechones de pelos, hubo patadas y golpes. En ese episodio intentó matarla pero no pudo”.

Yesica evitaba por todos los medios que sus hijos tuvieran contacto con su asesino. Cuando debían verlo, un familiar de él los pasaba a buscar. Pero la manipulación era tal que la convenció de volver a visitarlos. “Él se aprovechó de esa confianza y terminó con el triste final”, sentenció Micaela.

Rojas está detenido y su causa se caratuló como homicidio agravado por el vínculo a cargo de la Fiscalía Nº 1 de Presidente Perón, según el medio local El Peronense.

Por el momento, según informó la madrina, los hijos están al cuidado de una tía. Las familias de Yesica y Víctor residen en Laguna Blanca. Este miércoles por la noche llegaron los padres de ella y traerían a los menores a Formosa, pero aún no hay información concreta acerca de la tenencia.

“Esta vez parece que lo tenía todo planeado, porque aprovechó el horario en que ella estaba sola”, se lamentó la mujer.

En los relatos de Rosalía, su prima, quien habló en los medios nacionales, el femicida la hostigaba, se le aparecía en lugares, la amenazaba por teléfono. Ejercía violencia psicológica.

“Era una crónica anunciada. Él no aceptaba que ella lo denunció. Años soportó golpes ocultos”, aseguró la familiar.

“Ella era una persona muy sociable, hermosa por dentro y por fuera”, la recordó Micaela.

Esta tarde, familiares, vecinos y organizaciones que bregan por los derechos de las mujeres y contra los femicidios se concentrarán en la Fiscalía Nº 1 de Guernica para pedir justicia por el femicidio de Yesica Vera. “Justicia por ella y por los chicos”, aclararon.

El número de femicidios en Formosa asciende a diez

Si bien en los observatorios que contabilizan los femicidios a nivel nacional el caso de Yesica sumará en las cifras de la provincia de Buenos Aires -porque se tiene en cuenta el territorio que habitaba la persona- para la sociedad formoseña, el número de víctimas de femicidio suma diez en lo que va del año.

En abril, hubo un caso similar en Quilmes, provincia de Buenos Aires. Sandra Marilina fue asesinada por su novio Cristian. Tenía 23 años, estudiaba periodismo y era oriunda de Clorinda.