Un grupo de vecinos del barrio Virgen del Rosario de la ciudad de Formosa denunció que un local de la zona en el cual se desarrollan recitales musicales genera ruidos molestos durante los fines de semana, lo cual impide a las familias poder conciliar el sueño, en el marco de una situación que se registra desde hace un año y sobre la cual no han recibido ninguna solución de fondo por parte de las autoridades correspondientes. Así lo afirmó Vanina Brunelli, una de las vecinas del sector, a La Mañana.

En lo vinculado a este tema, el defensor del Pueblo de la provincia, José Leonardo Gialluca, aseguró a este Diario que el negocio denunciado es un local en el cual se realizan “espectáculos en vivo” de distintas bandas musicales y que el negocio cuenta con habilitación de la Municipalidad de Formosa. No obstante, detalló que el sistema de insonorización de ese lugar es “totalmente insuficiente” y que, a raíz del conflicto generado por esta situación, se efectuaron “distintas audiencias de mediación” en la Defensoría.

Además, contó que ni en esas instancias ni en la mediación realizada a través del Poder Judicial hubo “voluntad por parte de ambos sectores en encontrar una solución a este tema” y que la Defensoría pidió el cierre del local.

También agregó que el responsable del negocio demostró “intolerancia para encontrar una solución” y que existen Ordenanzas en Formosa capital y en el interior provincial que establecen “cuando hay ruidos molestos y los horarios y escalas de picos de frecuencia, de acuerdo a la hora”, por lo cual en esta problemática “todo está establecido”.

A continuación, el ombudsman provincial remarcó que “quien tiene que aplicar las sanciones, las clausuras preventivas o definitivas o las multas es la principal infractora de las ordenanzas”.

“Tenemos vecinos que denuncian al Municipio por la producción de ruidos molestos. Hasta la propia Iglesia Católica, en sus celebraciones con petardos, también vulnera las ordenanzas, al igual que el propio Estado provincial, los clubes y los municipios. La Municipalidad de Formosa, que tiene el poder de policía y la obligación de clausurar preventiva o definitivamente este tipo de lugares, es la principal infractora de las ordenanzas”, explicó Gialluca a este Diario.

Por otro lado, precisó que aunque el sistema de insonorización esté bien instalado, si el ruido molesto es excesivo, ese sonido “va a molestar a los vecinos”. “Yo no puedo creer que el responsable del local, cuando va a tocar una banda, no hable con los músicos y les diga que actúen con determinados decibeles y en determinados horarios. Eso es lo normal. Acá hay una falta de respeto hacia el vecino y una falta de acción por parte del Municipio”, recalcó.

“Si los vecinos van a la Justicia, tendrán que probar los daños o los perjuicios que se les están causando a través de peritos y pagar esos peritajes. Entonces, desde la Defensoría hemos pedido la clausura preventiva y definitiva, en base a las Actas de Infracción contravencionales que labraron los inspectores de la Municipalidad, a quienes hemos acompañado. Esas actas demuestran que el local incumple con las ordenanzas. Desconozco por qué demora tanto el Tribunal de Faltas de la Municipalidad en resolver esto y por qué el Municipio no ‘toma cartas’ en este asunto. Hasta ahora, no tenemos una respuesta”, manifestó José Gialluca.