El gerontólogo José Manuel Viudes y la neuróloga Valeria Gómez se refirieron al deterioro cognitivo en adultos jóvenes, un cuadro que según ambos profesionales, se puede prevenir con ciertos hábitos saludables. En este marco, se recomendó mantener una alimentación saludable, desarrollar ejercicio físico, realizar actividad social y leer, una costumbre que incentiva el uso de la imaginación; y se recalcó que para evitar este padecimiento, resulta fundamental “dormir bien”, al igual que evitar las situaciones de estrés.

En principio, Viudes aclaró a La Mañana que son adultos jóvenes aquellas personas que tienen menos de 65 años, mientras que los adultos mayores son quienes tienen más de 65 años y los “adultos mayores mayores” son los ancianos de 75 años en adelante. “Nosotros queremos que los adultos mayores sigan trabajando hasta los 75 años, por el tema cognitivo”, apuntó.

Por su parte, la doctora definió a la memoria como “toda la reserva que tenemos de datos que vamos adquiriendo a lo largo de la vida y que se guardan en una determinada parte del cerebro”. También, expuso que esa “reserva” llega a las personas a través de la tensión, una de las funciones psíquicas superiores, junto con la memoria y la percepción.

A su vez, precisó a este diario que la tensión es “el punto de mayor concentración que nosotros le ponemos a algo”; y añadió: “En base a la tensión, nosotros captamos información, la percibimos y la seleccionamos. La tensión es selectiva, y esto tiene que ver con la voluntad y con la afectividad, porque le prestamos atención a lo que nos interesa. El estímulo tiene que llamarnos la atención, ser importante para nosotros; y a eso le tenemos que sumar la voluntad, para sostener la tensión”.

A continuación, la experta señaló que el deterioro cognitivo es un proceso que se detecta cuando una persona “se empieza a olvidar de ciertas cosas”, pero determinó que se trata de “olvidos benignos, que no afectan el normal desempeño de la persona, como cuando alguien se olvida de cerrar la puerta con llave”; y se mencionó que esto se suele dar cuando se produce “envejecimiento vascular”.

Seguidamente, la especialista dijo que los datos que utilizamos de manera cotidiana, como la contraseña del Homebanking y los números de una tarjeta de crédito, forman parte de la “reserva cognitiva” de una persona, y que “no todo olvido es demencia, ni toda demencia es Alzheimer”. En paralelo, comentó que el deterioro cognitivo puede surgir a partir de la hipertensión arterial, la diabetes y factores ambientales, como el sedentarismo.

Por otro lado, Viudes reveló que de acuerdo a un trabajo realizado por la Universidad de Harvard, en el cual fueron estudiadas 4.000 mujeres durante 20 años, desde los 35/45 años de edad y dándoles “siete consejos saludables”, se llegó a la conclusión de que aquellas que respetaron cuatro o más de esas recomendaciones, redujeron en un 50% el deterioro cognitivo, por lo cual remarcó que este proceso es “claramente prevenible o mejorable”.

En esta línea, el médico puntualizó que algunas de las siete conductas recomendadas por la Universidad mencionada para retrasar el envejecimiento en lo vascular y el envejecimiento en general son alimentarse con la “dieta mediterránea” y evitar “las ‘cuatro P’: pan, pastas, pizzas y patatas”, al igual que “las carnes rojas procesadas”.

Sumado a esto, la doctora Gómez sugirió escuchar la radio de manera cotidiana, debido a que ese medio brinda información para que la persona esté “constantemente conectada con el exterior”, al igual que “hacer ejercicio” y tener “actividad social, a todas las edades”.