El médico epidemiólogo Mario Romero Bruno advirtió que en los últimos cinco días se detectaron 50 casos nuevos en ciudad capital, siendo actualmente la jurisdicción con mayor incidencia del virus. Por esta situación, se considera que la ciudad pasó de tener circulación comunitaria “baja” a “moderada”.
Este jueves se detectaron 23 casos nuevos de coronavirus, de los cuales 17 corresponden a Formosa capital: ocho por consultas por síntomas leves, tres por consultas por egreso de la ciudad y seis de contactos estrechos en domicilio.
De los demás, cuatro son de Clorinda: dos de controles por internación con síntomas graves y dos por contactos estrechos en domicilio; uno de Palma Sola por búsqueda activa en terreno y otro de Pirané, también por búsqueda activa en terreno.
En ese marco, Romero Bruno expuso los números de casos detectados a diario en los últimos 14 días en capital: “El 18 de febrero, siete casos, luego bajaron a uno, el día siguiente cero, luego cuatro, dos, cero y desde el día 26 de febrero, estamos hablando de los últimos seis días, se fue a seis, después cinco”. Aclaró: “Ya no volvió a bajar desde el día 27, al contrario, el 28 fueron 12; el 1 de marzo, nueve; el 2, diez; el 3, 17”.
Además, de los 228 casos diagnosticados en la ciudad de Formosa, el 34% está activo, a diferencia de Ingeniero Juárez que, de 257, sólo uno permanece activo, es decir, el 0,1%; y de Clorinda, que tiene el 18% de casos de coronavirus activos, es decir, “que capital hoy es el lugar más preocupante por la cantidad de habitantes, por la situación contextual, por el relajamiento que tuvimos entre todos”.
“La decisión apunta a proteger la salud”
Consultado por La Mañana sobre los motivos que puede tener el brote en capital, el médico explicó que la ciudad capital de Formosa es la más poblada de la provincia, con aproximadamente 250 mil habitantes, lo que expone a una mayor cantidad de personas a contraer el virus. En este escenario, señaló que se observa un relajamiento en el cumplimiento de las medidas sanitarias: fiestas o eventos con muchas personas, en los que no se respeta el distanciamiento ni se utiliza el barbijo.
Entonces, la decisión sanitaria de que la ciudad de Formosa regrese al ASPO apunta “a proteger la salud y la vida de todos los formoseños”.
“Si no hubiéramos tomado decisiones correctas tendríamos una cantidad de muertos de 115 casos cada cien mil habitantes en Argentina, versus lo que tenemos nosotros que son 2.9 por cada cien mil, esto demuestra que evitamos cientos de muertes”, sostuvo.
“Lo que vemos hoy es una foto de lo que pasó 14 días atrás, en la transmisión y el contagio, es esperable de que también tengamos casos más graves: dos pacientes de capital hoy tienen asistencia respiratoria mecánica, que no teníamos hace una semana atrás, esto es reciente; y es de esperar que sigan apareciendo más casos y más casos graves y ojalá no lamentemos el fallecimiento de nadie”, manifestó Romero Bruno.
En esa línea, el médico problematizó la cuestión de si la decisión es aplanar la curva de contagios o demolerla y que no haya más contagios; y argumentó: “Hay medidas que son más flexibles, que va a restringir algunas actividades, vamos a disminuir los casos, pero seguirán apareciendo, va a haber otro brote, rebrote y más casos y así vamos a ir teniendo no solo consecuencias en la salud de la comunidad sino también en el sistema de salud”.
Aseveró: “El sistema de salud formoseño está preparado en toda su extensión, pero lógicamente una cantidad de casos que se multiplican con rapidez como este virus, puede hacer que se sature, ocurre en cualquier lugar”.
También Romero Bruno recordó que “tenemos la experiencia reciente” de las restricciones del mes de enero y cómo se logró disminuir la cantidad de casos, incluso en Ingeniero Juárez, donde se volvió a Fase 1, actualmente hay un solo caso activo y no fueron detectados más en los últimos tiempos.