Desde un reconocido laboratorio de análisis clínicos de la ciudad, su titular Raymundo Motter habló con el cronista de La Mañana en Vivo sobre la importancia de la educación para crear responsabilidad ante el aumento de casos de HIV positivo en Formosa. Brindó cifras alarmantes. Mostró su preocupación por la falta de conciencia en los jóvenes. Y recomendó controles periódicos para romper con la cadena de contagio.

Primero, el prestigioso bioquímico dejó en claro que “en la actualidad, el HIV bien manejado dejó de ser un problema gracias a los programas de provisión de medicamentos y las coberturas de obras sociales. Aclaró que una persona portadora de la enfermedad puede hacer su vida tranquilamente si lleva un control médico acorde.

Si bien las estadísticas marcan que los casos de HIV van en aumento, Motter se centró en la importancia de la educación y la toma de conciencia como método de prevención. “A la problemática se la enfrenta, no se la esconde, por eso los padres deben hablar con sus hijos sobe la enfermedad, como los docentes lo tienen que hacer con sus alumnos, o las autoridades con los médicos. No nos tenemos que resignar y bajar la guardia. Hay que tomar conciencia cada uno en su ámbito”, expresó.

En el terreno de las cifras, el bioquímico indicó: “En nuestro laboratorio, detectamos entre uno y dos casos nuevos de HIV positivos por mes, cuando el año pasado pescábamos uno cada tres o cuatro meses. La estadística marca un aumento de la enfermedad, principalmente, en la franja de los 18 a 30 años”.

A la falta de conciencia, como una de las variables en el incremento de los casos, el profesional mencionó que actualmente la libertad sexual en los jóvenes es mucho más amplia que décadas anteriores.

“Al haber mayores libertades, tiene que haber mayor educación. Necesariamente tiene que ir acompañado para que no se genere un gran problema. La educación lleva a la responsabilidad y la responsabilidad al cuidado para no seguir alimentando la cadena de contagio”, recomendó.