El calendario de la Asociación de Pilotos de Rally y Karting de Formosa, indica que entre el 14 y 15 de septiembre habrá que trasladarse hasta la ciudad de Clorinda para ser parte de la sexta fecha del certamen; mientras tanto los pilotos buscan poner a punto sus autos a fin de poder seguir bajando tiempos para, a su vez, acomodarse mejor en el campeonato.

Es el caso de Gabriel Bobadilla e Iván Quintana, quienes vienen de oficiar de piloto y navegante respectivamente en Perín como parte de la Clase N4, el resultado no fue el esperado, pero aún así terminaron conformes al ser dos de las caras más nuevas que tiene este deporte y su objetivo es acumular experiencia.

“Hace un tiempo que corría karting, abandoné y ahora me dedico al rally. Vengo de tener mi debut como piloto ya que lo venía haciendo como copiloto hace un par de años” comentó Bobadilla, en una visita de la dupla al programa Ovación Radio que se emite por FM Viva 102.3.

Su apego por esta actividad se dio “porque siempre me gustó la velocidad y se me dio la oportunidad de poder comprar un auto para probar y verlo, y la verdad que me gustó mucho” indicó, para después bromear cuando se le consultó sobre su copiloto con un “le falta un poquito todavía, ja”.

Pasar de una actividad a otra puede que lleve su tiempo de adaptación, pero en el caso de Bobadilla, dijo: “no me costó tanto ya que arriba de un karting aprendí bastante sobre cuestiones de manejo”, sin olvidar que uno lo hace sobre asfalto y en otro en camino de tierra.

En el caso de Quintana, ésta también es su primera vez, con la diferencia de que no tuvo la oportunidad de estar en acción en ningún otro deporte que tenga que ver con la velocidad. “Siempre lo acompañé a Gabriel, y esto de comprar el auto para entrar en una categoría era algo que lo veníamos pensando hace mucho” contó.

Entenderse en plena competencia “es complicado” como lo reconoció después, para basar sus dichos en que esto se da “por el ruido que hay, más la adrenalina, ya que vamos a mucha velocidad y cuesta comunicarnos dentro del auto para saber donde tenemos que doblar, meter los cambios y demás; es todo un tema”.

Al mismo tiempo, se mostraron muy conformes con todo lo que hace a la organización de cada cita, tanto como el circuito habilitado para la ocasión.

Bobadilla, por ejemplo, señaló que la primera carrera que tuvieron en Perín, como se mencionó, “fue muy buena; hubo un tramo bastante lindo donde pasamos de la tierra al asfalto”.

“Nos sumamos por diversión y, por supuesto, para agarrar ritmo, ya que no se trata de ir a un lugar y subir a un auto de carrera sino que todo sirve y este trabajo tiene un seguimiento, por lo que apuntamos a estar mejor el año que viene”.

Es un hecho que cada carrera les dejará varias cuestiones por mejorar y así tratar de superarse permanentemente en esta actividad que no sólo requiere estar presto a subirse y acelerar, con todo lo que eso implica, sino también contar con cierto respaldo económico para poder ser uno más dentro de los que, con pasión, muestran en el año que querer es poder y tratan de progresar pese a cualquier escollo.

“Terminamos con el auto hecho pelota”, dijeron entre risas, pero confiados de que podrán prepararlo para salir nuevamente al circuito.