Tras reiterados pedidos por parte de varios rubros comerciales, ayer se informó la extensión del horario de atención comercial de 8 a 22 horas. La decisión se tomó por el status sanitario de la provincia y las altas temperaturas típicas de esta época del año. En ese sentido, La Mañana recorrió diferentes comercios de la ciudad para conocer la postura sobre esta novedad.

En principio, Claudia empleada de una peluquería calificó a la medida como “muy positiva” ya que podrán atender a clientes que desocupan tarde. “Tenemos clientes que salen a las 20 o 21 de sus trabajos y ahora tendrán tiempo de acercarse para un corte de cabello, este rubro siempre estuvo acostumbrado a atender hasta muy tarde”, afirmó.

Por su parte Gabriel propietario de un kiosco céntrico contó que, sin dudas, resulta buena la posibilidad de tener un mayor margen para la atención de clientes. “Estamos trabajando bastante bien, pero esto nos permitirá atender a más personas y se traducirá en mayores ingresos para el local”, especificó.

Además Carlos de Carnicería Friar, indicó que las altas temperaturas hacen que algunas personas salgan a hacer sus compras cuando baja el sol. “A varios no les alcanzaba el tiempo para pasar por el local, porque salen después de las 20 del trabajo. Es muy favorable para nuestro rubro y también para los supermercados”, señaló y agregó que ahora atenderán hasta las 21, como antes del inicio de la pandemia.

Por otra parte, Eunice empleada de una tienda de regalos comentó que en su caso el anuncio es bastante “cuestionable”. “Nosotros cerramos el local, tenemos que hacer caja y luego limpiar todo para el día siguiente. Cerrando más tarde, vamos a ir más tarde a nuestras casas”, lamentó. Y añadió que la medida es más “beneficiosa” para los kioscos de los barrios.

Por último Orlando, un kiosquero del Nueva Formosa se mostró muy conforme con el anuncio de la mesa del Consejo Covid y admitió que rápidamente se organizaron para comenzar a atender desde el momento de la autorización. “Muchos vecinos del barrio vienen después de las 21 al barrio y tener la puerta abierto un hora más es muy bueno porque no se van a quedar sin pan o alguna gaseosa para la cena. Siempre nos decían que algo les faltaba a la noche”, cerró.