La Municipalidad de la Ciudad propicia un programa a largo plazo que involucre a las instituciones educativas y al sector gastronómico en general para promover un cambio de paradigma alimentario. El objetivo central es prevenir el sobrepeso corporal que tiene altos índices en la Argentina como el resto del mundo y es causa de distintas patologías, tales como la resistencia a la insulina, diabetes, accidentes cardiovasculares e incluso algunos tipos de cáncer.

Así lo explicó la licenciada en Nutrición Lourdes Rodríguez, quien destacó que el intendente Jorge Jofré apuntala las políticas públicas en materia de salud, señalando la necesidad de una fuerte presencia en acciones concretas, en concordancia con el Proyecto Municipal y de coordinación y colaboración con el gobierno provincial.

Explicó que el proyecto fue elaborado por la Coordinación de Acción Social de la comuna capitalina que funciona en el barrio La Alborada, entre las calles Berutti y Diagonal, donde los interesados pueden concurrir todos los días hábiles de 8 a 12 y de 16 a 20 horas.

Cambio de hábitos

“La intención es instalar un programa a largo plazo que cambie los hábitos y conductas de la población en materia alimentaria. Esto va de la mano con el cambio de paradigma, realizando el abordaje desde planes de alimentación y no de dietas, que son de muy corto plazo y las personas tienden a dejarlas. Lo que pretendemos se trata de internalizar en las personas conductas alimentarias saludables en forma habitual”, resaltó Rodríguez.

En esta primera etapa -indicó la nutricionista- la intención es insertar estas políticas municipales de promoción y protección de la salud en ámbitos educativos bajo un plan denominado “Cantinas Saludables”.

Se busca que las instalaciones que brindan alimentos a los estudiantes de todos los niveles y modalidades de la educación contengan alimentos y bebidas saludables como opción más nutritiva; lo que irá acompañado de las actuales campañas de concientización, pero esta vez con mayor alcance ya que se destinará a docentes y padres.

“También se pretende -apuntó la licenciada Rodríguez- abarcar otros lugares donde los niños, jóvenes y adultos pasan mucho tiempo, además de los lugares escolares, como son los espacios de recreación y esparcimiento”.

“Propendemos a que se ofrezca una alimentación variada, segura y suficiente para niñas, niños y adolescentes, en esta primera instancia en los establecimientos educacionales. Con ello, se previenen factores de riesgo causales de la obesidad, hipertensión, diabetes e hipercolisteronemia, entre otros, y esto se logra con el cambio en los hábitos de consumo de los alimentos”, insistió.

“Debemos transformar los entornos obesogénicos en saludables”, señaló Rodríguez y remarcó que este programa, que se enmarca en las políticas integrales del Municipio, se concatena con la promoción del deporte comunitario como otro factor que aporta a la buena salud, por lo cual las cantinas también estarán instaladas en los clubes deportivos, resaltó.

La pretensión de máxima es que todo el sector gastronómico de la ciudad brinde, también, alimentos y bebidas saludables, por lo cual la exhortación de adherirse a este programa irá a los privados.