Durante la 16ª Feria Provincial y Nacional del Libro de Formosa, el doctor Julio Monsalvo presentó su libro "Vivencias en atención primaria de Salud (Desde el cuidado primordial de salud de los ecosistemas hacia políticas biocéntricas)", donde relata sus experiencias como médico en Chaco y en nuestra provincia, y también expone su visión acerca del bienestar de las personas y las condiciones del entorno circundante.
El médico, especialista en Pediatría, Diplomado en Salud Pública y Magíster en Ciencias, efectuó diversos trabajos con comunidades originarias, promoviendo el diálogo intercultural, las actividades autogestionadas, el cuidado de los ecosistemas y un cambio de paradigma cultural. A su vez, ejerció la docencia y publicó libros y artículos en diferentes medios de comunicación; y es precursor del concepto de "alegremia", en alusión a la "alegría en la sangre".
El libro tiene cinco capítulos, con algunos documentos como Anexos, incluyendo la Declaración de la Conferencia Internacional sobre Atención Primaria de Salud de Alma-Ata, realizada en Kazajistán, del 6 al 12 de setiembre de 1978, donde 134 países del mundo y 67 organizaciones internacionales subrayaron la importancia de la atención primaria de salud como estrategia para alcanzar un mejor nivel de vida de los pueblos. "Esas páginas tienen plena vigencia, y marcaron mi labor y la de muchos otros trabajadores de la salud en distintos lugares del mundo", acotó.
"La función principal del trabajador de la salud es acompañar permanentemente a la persona que acude a los servicios sanitarios. A su vez, con los pueblos originarios aprendí la cosmovisión de los Qom, comprendí que todo tiene espíritu, y pude compartir ceremonias ancestrales. Agradezco profundamente a esas comunidades, a través de las cuales pude recuperar un sentido de pertenencia", agregó.
"Los seres humanos debemos comprender que pertenecemos a la naturaleza, y que no podemos seguir depredando el planeta. La salud se origina en el suelo vivo, con plantas, animales y personas sanas. Las necesidades vitales e indispensables son el aire, el agua, el alimento, el albergue, el amor y el arte. Si tenemos esas pautas que empiezan con 'a', tenemos alegría en la sangre, que es el indicador de salud", manifestó Monsalvo.