En diálogo con La Mañana, el meteorólogo y docente Antolín Moral afirmó que el río Paraguay, que en un momento llegó a un pico máximo de 9,72 metros en el Puerto de Formosa y este sábado presentó 9,37 metros a las 18 horas, tendrá una lenta disminución en su altura, que tardará un tiempo en concretarse. Por ello, anticipó que el curso de agua mantendrá un nivel de altura alarmante durante los próximos meses, bajaría de manera gradual y recuperaría su nivel normal para fin de año.
“La bajante que está teniendo el Paraguay es bastante lenta, propia de un río de llanura. Por lo tanto, tardará en ubicarse por debajo del nivel de evacuación y de alerta. En este momento, esos 9,37 indican que está por encima de los 7,80 metros, que es el nivel de alerta, y de los 8,30 metros, que es el nivel de evacuación. Por ello, la altura actual sigue siendo preocupante, especialmente en la zona Ribereña”, explicó Moral a este diario.
“La tendencia es a disminuir, porque generalmente el río Paraguay alcanza su máximo en la época actual del año, y no más allá de julio. Pero estamos ante un año bastante atípico en cuanto a lo meteorológico. Hay mucha inestabilidad. No creo que en julio lleguemos a tener seis metros, como sucedió en 2018. A su vez, en la transición entre diferentes estaciones del año se producen fenómenos meteorológicos bastante significativos e irregulares, como precipitaciones que superan los registros promedio de cada una de las localidades”, añadió.
“La intervención del hombre en la naturaleza hace que las lluvias impacten sobre la Tierra en forma muy importante, y produzcan grandes destrozos, y que también se originen nuevas precipitaciones”, acotó.
Por otro lado, el especialista anticipó que no se pronostican lluvias importantes para los próximos días en la cuenca media y alta del río Paraguay, aunque sí se esperan algunas precipitaciones en la zona próxima a la ciudad de Asunción, que se ubicarían en el orden de los 35 milímetros acumulados en siete días.
Esta semana llega el frío
En otro orden, el experto aseveró que el ingreso de los sistemas frontales de frío “se está haciendo esperar”; y agregó que las numerosas lluvias y caídas de granizo que se registraron en el centro del país, y que son típicas del otoño, se trasladarán lentamente al sector Norte-Nordeste del país.
En esta línea, Antolín Moral detalló que el clima frío llegará al NEA entre el lunes 17 y el martes 18, con una baja probabilidad de precipitaciones para Formosa entre el martes 18 a la noche y la madrugada del miércoles 19. Luego de esos momentos, no se esperan precipitaciones para nuestra provincia hasta la última semana de junio.
Los efectos del cambio climático
Según el Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF), las inundaciones en Paraguay y en la región son el retrato vivo del cambio climático y están directamente relacionadas con la deforestación, a su vez responsable del calentamiento global. Es sabido que la temperatura media del planeta subió 1,5 grados en los últimos 50 años. Los datos publicados por la ONU y por otras organizaciones internacionales, como la Organización Panamericana de la Salud (OPS), no dejan lugar a dudas.
El cambio climático puede agravar el impacto de los fenómenos cíclicos naturales y afectar a la salud de la población. El riesgo es que aumenten las enfermedades respiratorias y la presencia de mosquitos que transmiten enfermedades tropicales como el dengue, el zika y el chikungunya. Para los expertos, la caótica situación del Paraguay es la imagen viva de que el cambio climático ya está aquí.
La poca cantidad de precipitaciones registradas en las últimas semanas permite que el nivel del río Paraguay en diferentes zonas descienda de nivel a un ritmo sostenido.
Como contrapartida de lo que sucede en la cuenca media y baja, en el vecino país las autoridades encargadas de los estudios hídricos señalaron que, incluso en Bahía Negra, el nivel se encuentra estacionado en un nivel tan bajo que no se había registrado en 32 años. Los reportes muestran un descenso sostenido en la cuenca media y baja, de entre 4 y 6 centímetros diarios en Vallemí y Concepción, mientras que en Alberdi, frente a Formosa, si bien es más lento, desciende entre 1 y 2 centímetros diarios.