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El vicepresidente de la Delegación Regional NEA de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Antonio Fabián Hryniewicz, afirmó a La Mañana que el bono de fin de año decretado por el Gobierno nacional y acordado con los gremios que integran la Confederación General del Trabajo (CGT) no podrá ser pagado por las micropymes, el sector que tendría mayores dificultades para afrontar el abono de este plus. En este sentido, pidió que el Gobierno nacional tome "medidas profundas, que apunten a la reactivación de la producción y el consumo, y que impliquen una baja de los costos operativos para el sector comercial, para que pueda recuperar la competitividad".
"Esta medida es una especulación política. En estos casos, el que siempre queda mal parado es el empleador, porque el común de la gente, que merece una compensación para sus alicaídos ingresos, cree que el empleador no quiere pagar, cuando en realidad no puede. En otras oportunidades, cualquier industrial o pequeño comerciante en solidaridad con los trabajadores, solía tener la herramienta de acceder a algún tipo de financiamiento bancario para poder satisfacer esa obligación. Ahora, eso está vedado: y el crédito disponible es tremendamente caro", explicó Hryniewicz a este diario.
Además, el referente empresarial consideró que el bono no solucionará el problema del poder adquisitivo del trabajador. "Este plus agrava la situación de los empleadores, sobre todo de aquellos que son propietarios de micropymes, quienes se ven obligados a replantear el mantenimiento de sus emprendimientos. A su vez, este bono se dispersará rápidamente, porque es el equivalente de lo que sería el costo de dos facturas de luz", aseveró.
A continuación, Hryniewicz recordó la necesidad de acordar que el bono pueda pagarse a cuenta de futuros aumentos salariales. "Desde la CAME propusimos esta alternativa. Nos parece una opción razonable, al igual que otros aspectos: que no sea remunerativo, que se abone en más de dos cuotas y que sea segmentado según el poder de pago que pueda tener la empresa empleadora. La situación económica de un emprendimiento que tiene 200 o 300 empleados no es la misma de aquel que tiene tres o cuatro trabajadores", expuso.
"El fin de año se presenta muy complejo para el sector comercial, sobre todo en las ciudades de frontera, en un contexto de retracción del consumo, opciones de compra muy restringidas y la obligación de pagar aguinaldos. A esto hay que sumar las previsiones que deben tomarse para los meses de actividad baja, como enero y febrero. Pero este bono no resuelve los problemas de los trabajadores, y complica las situación de las PyMEs y micropymes", manifestó Fabián Hryniewicz.
?Nota completa en nuestra edición impresa del 11/11/2018