Hoy, 19 de noviembre, es el Día Mundial para la Prevención del Abuso Sexual en las Infancias, fecha instituida para visibilizar, concientizar y prevenir esta problemática que afecta a cientos de niñas y niños.
La Dirección de Estadísticas del Poder Judicial de Formosa elaboró un reporte estadístico sobre casos de abusos en los cuales las víctimas fueron menores y estableció que desde el año 2015, las denuncias por abusos se han incrementado en un 37,8%, de 240 a 342 casos.
Según el informe, en 2015 hubo 240 denuncias; en 2016, 242; en 2017, 290; y en 2018 se denunciaron 342 casos con 354 víctimas. En promedio, por juzgado ingresan un total de 38 casos al año. La localidad con mayor número de casos cada 10.000 es la de Ingeniero Juárez, con un valor de 10,9. La ciudad Capital, con diez veces más población, tiene un coeficiente de 8,2.
De los casos denunciados, la mayoría corresponden a la tipología abuso sexual simple (71,1%); en tanto, el resto de las denuncias corresponden a abusos agravados (28,9%). La mayoría de las personas denunciadas son de sexo masculino, representando un 87,43%. En un 1,8% de los casos son más de una persona y de distinto sexo.
Los datos utilizados en el informe fueron extraídos del Sistema de Gestión Penal y corresponden a los registros que se individualizan con delitos de abuso simple y abuso agravado, según la base de datos de todos los juzgados de instrucción y correccional de Capital, los dos Juzgados de Clorinda y el de Las Lomitas.
Perfil de las víctimas
Casi el 70% de total de víctimas es menor de edad (69,8%). El 17% restante es mayor. En tanto, el 79,7% de las víctimas son de sexo femenino, mientras que el 7,6 % corresponde al sexo masculino y del 12,7% no se registran datos.
En el 62,71% de los casos, la combinación más frecuente, las víctimas son menores de edad y de sexo femenino, es decir niñas; en segundo lugar, les siguen los abusos a mujeres mayores de edad.
Del total de casos de abuso sexual simple, la mayoría de las víctimas son menores de edad (69,8%); por su parte, del total de casos de abuso sexual agravado, el porcentaje de víctimas menores de edad es aún más alto: 74,5%.
Abuso
En 1959, con la Declaración de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas (ONU), el abuso infantil se consideró como un delito que trae profundas y graves repercusiones psicológicas, sociales, legales y médicas.
Se conoce como abuso o maltrato infantil a aquellas acciones cometidas por un adulto que van en contra del desarrollo físico, cognitivo y emocional de los niños. Los distintos tipos de abuso infantil son: abuso físico, abuso psicológico, la negligencia infantil y el abuso sexual.
El abuso físico es considerado como todo acto donde se utiliza la fuerza física de modo inapropiado o excesivo; el abuso psicológico comprende todas esas manifestaciones que afectan el desarrollo emocional de un niño; el trato negligente es la falta de supervisión y protección adecuada de los niños; y finalmente, el abuso sexual es el que implica forzar o seducir a un niño a formar parte de actividades sexuales.
La Convención Internacional de los Derechos de los Niños señala que todos los niños y niñas tienen derecho a ser protegidos contra la violencia, el abandono, el descuido, la explotación y el abuso sexual y que los gobiernos y sociedades civiles tienen un papel importante para garantizar que nunca sean maltratados en el entorno familiar, escolar o público.