Consultado por La Mañana, el ministro de Gobierno, Jorge González, evitó hablar del conflicto del Mercado Frutihortícola al afirmar que se trata de una cuestión de competencia municipal. Sin embargo, tomó la ocasión para poner de resalto el rol de los paipperos en la economía interna provincial, quienes ofrecen sus productos de manera directa, “sin intermediarios”, significando esto una ventaja para los bolsillos de los consumidores.

El funcionario, señalando una imagen de una mujer productora de este Instituto, que presidía la conferencia de ayer del Consejo COVID-19, señaló que el PAIPPA significa un círculo virtuoso, porque al inicio el Estado tenía que asistir a los pequeños productores con cajas de alimentos, dado que lo que producían no les alcanzaba para su subsistencia, y hoy son ellos quienes aportan productos para el programa Nutrir.

Dijo que desde 1996, cuando el gobernador Insfrán lo lanzó, el PAIPPA ha sido “revolucionario”, levantando las banderas y reclamos de las Ligas Agrarias “que tanta sangre ha costado durante la dictadura militar”.

“En la ciudad, los viernes funcionan las ferias PAIPPA en el playón de la calle Padre Grotti y en el predio del barrio La Paz. Los productores vienen a ofrecer directamente sus productos, que son naturales, frescos, formoseños y baratos”, destacó.

Luego enfatizó: “Evitamos que los intermediarios lucren con el trabajo de nuestros productores y que nuestros bolsillos lo sufran”.

Unos 10 mil paipperos también abastecen a las verdulerías

El coordinador ejecutivo del Instituto PAIPPA, Carlos Sotelo, comentó a La Mañana que actualmente hay unos 10 mil productores que lo integran y también abastecen a las verdulerías minoristas.

Haciendo referencia al conflicto que existe en el Mercado Frutihortícola, comentó: “Nuestros productores están abasteciendo a las verdulerías y a supermercados”, agregando que hay suficiente producción como para que no falten los productos en la ciudad.

Si bien reconoció que el escenario de pandemia trae algunas dificultades, los paipperos continúan trabajando respetando todas las instrucciones y medidas de seguridad, tanto en las ferias como en la distribución de los productos, que “hacen que tengamos el estatus sanitario envidiable en el país”.

Refiriéndose al Frutihortícola, consideró que el cambio es “indispensable” para el desarrollo y el cuidado de la salud. “Llevarlos a un lugar un poco más desconcentrado va a favorecer a la salud”, dijo, reduciendo el riesgo de contagio.