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La historia sin fin: fracasaron dos sesiones en un día, hubo chicanas, escraches y sigue pendiente la normalización

La oposición se había autoconvocado a las 18; entraron por la presidencia y el PJ no ingresó. Luego, el oficialismo asistió a la convocatoria de Di Martino a las 19, pero los primeros no dieron quórum. Todo sigue igual



El Concejo Deliberante capitalino sigue empantanado sin poder elegir sus autoridades ni arrancar de una vez con las sesiones ordinarias, al haber fracasado ayer dos convocatorias, una de la oposición y otra del oficialismo, rechazadas mutuamente por considerarlas inválidas. Así, se esperan nuevas convocatorias o una resolución de la Justicia para que el parlamento comunal pueda comenzar a trabajar este año y dejar atrás la puja por la vicepresidencia primera del Cuerpo, motivo del conflicto.

La sesión del arco opositor, integrado por el Frente Amplio Formoseño y la concejal Gabriela Neme por su monobloque Floro Eleuterio Bogado, estaba prevista para las 18, pero los ediles, acompañados por un escribano, dejaron constancia que las puertas del recinto estaban cerradas con llave. 

Por eso, lograron ingresar por la presidencia del Cuerpo minutos más tarde e ingresaron al recinto para la sesión autoconvocada, que no contó con el servicio de sonido ni taquígrafos. Esta instancia tuvo a Rubén Rodríguez como presidente y a Celeste Ruiz Díaz como secretaria, por ser los de mayor y menor edad respectivamente. 

El Justicialismo no ingresó al recinto, y una fuente del Concejo dijo a La Mañana que se debió a que el documento llamaba a una sesión "extraordinaria" y no a una "preparatoria". Luego, Adrián Muracciole diría que no se notificaron de esta convocatoria.

Tampoco se permitió que los periodistas pudieran ingresar a la sala de prensa, que se mantuvo con llave mientras los opositores permanecían adentro. Por eso, debieron tratar de seguir las instancias desde la galería del Concejo, en medio de los militantes apostados allí para increpar al radicalismo y a Neme.

Pasada media hora, Juan Carlos Amarilla, Fabián Olivera, Celeste Ruiz Díaz, Miguel Montoya, Rubén Rodríguez (FAF) y Gabriela Neme (bloque Floro Bogado) salieron del recinto y emitieron un enérgico repudio al PJ. Amarilla remarcó que la Ley 1028 les permite sesionar con la autoconvocatoria. "Evidentemente, el señor Di Martino y el bloque justicialista confunde la tarea del personal, que debe estar a disposición del Concejo. Esto porque no estaba el cuerpo de taquígrafos, no estaba el sonido y, lo que es peor, cerraron parte del edificio", dijo.

"Con esto queda demostrado que la crisis no está generada por nosotros, porque cumplimos con nuestra palabra de venir para normalizar la situación. Ellos, estando en la sala contigua al recinto, no quisieron entrar a sesionar.

Gabriela Neme, desde su bloque unipersonal, consideró que ayer fue "un día de luto para la institucionalidad de Formosa. No nos quisieron dejar entrar y se lo impidieron al escribano que llamamos previendo todo esto. Sabemos que (el oficialismo del Concejo) son parte de la dictadura, el patoterismo y la represión que hay en Formosa. Cuando digo que no hay democracia, este es el testimonio", enfatizó.

Finalmente, anunciaron que recurrirán al Superior Tribunal de Justicia porque "esto es un atropello a la institucionalidad". Le pedirán al órgano judicial una medida declarativa de certeza que disponga cuál de las dos sesiones preparatorias tiene validez: la convocada por el arco opositor o la que emitió Di Martino. En este sentido, insisten en que este concejal dejó de ser el presidente del Concejo el 28 de febrero, algo que, según señalaron, el propio intendente Jofré reconoció al realizar un acto público el 1 de marzo.

Oficialismo

Luego de estos hechos, a las 19, los concejales del Justicialismo ingresaron al recinto para la sesión convocada por Di Martino, acompañados del personal del Concejo. Recién allí se habilitaron el sonido y la sala de prensa para permitir el ingreso de periodistas.

El concejal Adrián Muracciole pidió que se lea la nómina de ediles que se notificaron de esta convocatoria, resultando que cuatro opositores firmaron "en disidencia" y dos se notificaron normalmente: a éstos se les exigió que ingresaran al recinto, pero no lo hicieron. También pidieron disculpas a la ciudadanía por la situación irregular del Cuerpo y se recordó que los ediles llegaron por el voto popular para trabajar, agregando que hay temas por abordar como una actualización en la tarifa de remises y taxis. Media hora después, se dio por levantada la sesión. 

Darío Di Martino dijo a la prensa que tenía "mucha fe" en que la oposición se iba a presentar "por las expresiones públicas que habían hecho". Se consideró "optimista" y aseguró que seguirán trabajando para normalizar el Concejo, adelantando que emitirá una nueva convocatoria para la próxima semana. 

Dijo además que es "llamativo" que la oposición no lo reconozca porque asistió a seis sesiones anteriores convocadas por él y repentinamente después del 28 de febrero afirman que ya no lo es.

"La Justicia hará su trabajo, pero esto se tiene que resolver en el ámbito político como corresponde", remarcó. Muracciole agregó que toda cuestión en conflicto se debe debatir en el recinto.












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