En diálogo con la mesa periodística de La Mañana en Vivo, el jefe comunal de la localidad de Laguna Blanca, Ricardo Lemos, se lamentó por la oportunidad perdida de recibir este año a los visitantes formoseños para la Fiesta del Pomelo aunque reconoció que la medida de suspender el evento estuvo acertada.
"Estábamos muy entusiasmados con esta fiesta tradicional en nuestro pueblo; pero somos realistas a la situación complicada que están viviendo nuestros productores de la zona con las inclemencias del tiempo y decidimos suspender las actividades del festival. O al menos postergar para el mes de septiembre con un evento similar para todos los jóvenes”, dijo.
Según el Intendente, la medida de no realizar la edición 2019 de la fiesta se tomó de manera razonable de acuerdo a la grave crisis hídrica que afectó a todo el esquema productivo de la provincia. “Fueron dos meses de intensas lluvias y a eso se le sumó las crecidas de los ríos y afluentes a lo largo de muchos departamentos formoseños. Con la declaración de la emergencia agropecuaria y desastre ganadero no podíamos cumplir las actividades cuando hay productores y ribereños que no se recuperan aún”, aclaró.