En diálogo con La Mañana, el Dr. José Manuel Viudes, médico gerontólogo y neumonólogo del Hospital Italiano, argumentó por qué la población debería utilizar barbijo en la prevención del COVID-19.

La Organización Mundial de la Salud clasifica a los países con coronavirus en cuatro niveles: leve (1), moderado (2), moderadamente severo (3) y severo (4). “El último, donde estaría la Argentina se entiende que el virus ya está circulando alrededor nuestro y cuanto menos exposición tengamos al virus, será mejor”, inició.

Según Viudes, a los países que les fue bien, fueron los que se adelantaron a la “ortodoxia” de la OMS. “Para pasar al estadio 4 se deben demostrar fehacientemente los casos y los países subdesarrollados no tenemos suficientes kits para el diagnóstico. Se toman muestras a los pacientes que cumplen con el criterio de haber estado con alguien del exterior o haber viajado”, especificó.

Recordó que no se estudia a la totalidad de los pacientes por la insuficiencia de kits. “Hay un montón de pacientes a los que tratamos como un gris, pero tienen todos los criterios de la enfermedad. En ese sentido, ya que no tenemos los medios económicos, todos deberíamos usar barbijo”, subrayó a este matutino.

“Estamos jugando con fuego y la única arma que tenemos es ser obsesivos con el aislamiento. La herramienta para salvar la vida de nuestros hijos, padres, abuelos es quedarnos en casa y el lavado de manos"

Además, el profesional destacó otra interesante función del barbijo. “Al cubrir la nariz y la boca, difícilmente te lleves la mano a esas zonas donde puede ingresar el virus. Además, si le sumamos el uso de anteojos, cubriríamos los tres lugares por donde ingresa el virus”, sugirió. Mencionó que una persona se lleva las manos esta zona del cuerpo unas cincuenta veces al día.

Por otra parte, desaconsejó la utilización de guantes. “No estoy de acuerdo con el uso porque crea una falsa tranquilidad, de que estás aislado del virus pero se pega mucho más al guante y también porque nos olvidaríamos de lavarnos las manos”, insistió.

Según el neumonólogo, el país no cuenta con los respiradores suficientes ni el material ni la formación para un número amplio de enfermos. “Estamos jugando con fuego y la única arma que tenemos es ser obsesivos con el aislamiento. La herramienta para salvar la vida de nuestros hijos, padres, abuelos es quedarnos en casa y el lavado de manos”, concluyó.

CORRECTO USO DEL BARBIJO

1. Antes de la colocación, lavarse las manos con agua y jabón.

2. Cubrirse la boca y la nariz con el barbijo y asegurarse de que no queden espacios entre la cara y la máscara.

3. Evitar tocarse el barbijo mientras se usa, lavarse las manos con agua y jabón.

4. Cambiarse el barbijo tan pronto como esté húmedo y no reutilizarlo.

5. Para sacarlo, hacerlo por detrás sin tocar la parte delante del barbijo, tirarlo inmediatamente en un recipiente cerrado y lavarse las manos con agua y jabón.