El estudio pone de manifiesto que "Argentina durante el 2017 rompe los estándares internacionales -respecto al precio al consumidor de la leche fluida - perjudicando de manera directa a los consumidores".
"Acá hay que manejar los volúmenes para que cuando sobra leche hay que exportarla sí o sí, al precio que sea, porque no hay que sobreofertar el mercado interno. Hay que buscar un sistema por el que el productor perciba lo justo. No es posible que el productor se lleve el 29% de la torta y la comercialización el 30%, la industria el 28%, y el resto el Estado con los impuestos", detalló a radio Mitre el presidente de la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe, Marcelo Aimaro.
El problema de los costos estructurales en la Argentina, en un presente de alta inflación por encima del 20% anual, también deja en evidencia que a pesar de los precios récord al público, que medidos en dólares superan los internacionales, los salarios promedio entre los mismos países comparados dejan a la Argentina en el puesto 13° del listado, según el análisis del Centro de Almaceneros de Córdoba.
"Sin lugar a dudas, el precio de la leche fluida en Argentina se encuentra desfasado y desequilibrado respecto al precio internacional, ocasionando un abrupto descenso en su consumo y el encarecimiento de sus derivados", concluyó el análisis.