El jefe del Regimiento de Infantería de Monte 29, coronel Orlando Fernández, remarcó la importancia de escuchar y dar espacios a los excombatientes que están vivos, para que las nuevas generaciones conozcan la historia de esta etapa del país.
En declaraciones a La Mañana, destacó el acompañamiento de la gente a los actos, al cumplirse 42 años de la gesta, e instó a interiorizarse en lo que significó esta guerra. “Tenemos combatientes que han vivido en carne propia la guerra de Malvinas, y hay que homenajearlos, hacerles sentir el reconocimiento y que nos sirvan a nosotros como experiencia, sobre todo al Ejército, que sacamos mucha experiencia de esa guerra y nos ha servido para formarnos”, remarcó.
Fernández recordó tener 12 años cuando se produjo el conflicto armado, y si bien su padre fue militar, no participó de éste por haberse retirado tres años antes. De todas maneras, el ejemplo de valor de los soldados, a quienes seguían por la radio y la televisión, y la vocación de su padre, lo llevó a unirse al Liceo militar y seguir esta carrera, que actualmente lo trajo a Formosa.
En coincidencia con uno de los veteranos que dialogó con La Mañana, Fernández consideró que lo que corresponde en este momento es que se pueda recuperar las Malvinas por la vía diplomática, mediante el poder político y civil, en forma pacífica.
“Nosotros, como fuerza armada, existimos en razón de ser el brazo armado del país y nos tenemos que preparar para eso. El Ejército tiene esa función: defender la Patria y la soberanía ante un enemigo externo, y eso es nuestro trabajo. La sociedad nos paga a nosotros para que estemos preparados como soldados, en caso que nos toque ir”, dijo, sin embargo.
Agregó que los veteranos de Malvinas son “el norte” y el ejemplo que toman para ser mejores soldados, y por eso remarcó la necesidad de escucharlos. “Es bueno que las instituciones los inviten para que cuenten sus experiencias, así los jóvenes también pasan a formar parte de esa historia, a tomar conciencia de lo que era nuestro país, y así hacer un futuro mejor, porque si no conocemos nuestra historia, muchas veces volvemos a cometer siempre los mismos errores”, consideró.