Isaac Rudnik, director del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana, aseguró a La Mañana que de acuerdo a los datos del ISEPCI, que mide el Índice Barrial de Precios en comercios de cercanía, en agosto hubo un aumento mensual del orden del 20% en el valor de la Canasta Básica Alimentaria en Formosa, mientras que en otras provincias la variación fue del 30%. Asimismo, remarcó que los relevamientos de la entidad indican el impacto de la inflación en aquellos sectores que se encuentran en la pobreza y en la indigencia.

“Nosotros realizamos este chequeo en 19 provincias, y tiene la particularidad de que lo hacemos sobre los productos de la Canasta Básica Alimentaria, y en los barrios populares. Es una expresión de lo que está sucediendo en ese sector de la sociedad”, comentó.

“El INDEC -Instituto Nacional de Estadística y Censos- abarca un universo mucho más amplio de sectores de la sociedad, porque tiene que reflejar la evolución de los precios en un promedio de toda la sociedad. Pero, además, nos parece que como sucede con otras encuestas, los sectores que están por debajo de las líneas de pobreza y de indigencia están subrepresentados en las muestras que ellos utilizan”, explicó Rudnik a este diario.

“Esto es un resultado de cómo ha avanzado en la sociedad tan ‘aceleradamente’ y se ha consolidado una franja cada vez más amplia de sectores sumidos en la pobreza, y los procesos de construcción de las muestras para las distintas encuestas tienen un proceso más lento. Entonces, nos parece que lo que nosotros estamos reflejando es lo que sucede en esa franja de la población -el segmento de pobres e indigentes-. No pretendemos hacer una encuesta de precios como la que puede hacer el INDEC”, agregó.

A continuación, el economista consideró que existe “una ‘brecha’ importante” entre los precios que las personas pueden obtener en los negocios de cercanía, donde habitualmente compran los vecinos y vecinas de los barrios, y en los valores que ofrecen las grandes cadenas de supermercados.

Medidas económicas

Por otro lado, opinó que “algunas” de las medidas económicas anunciadas por el Gobierno nacional tras la devaluación del 22% en el tipo de cambio “oficial” podrían generar un “alivio” en determinados sectores de la sociedad, como los beneficiarios y beneficiarias de planes sociales, quienes podrán acceder a la reducción del Impuesto al Valor Agregado en la compra de un conjunto de productos esenciales a través de las tarjetas de débito.

No obstante, advirtió que los comercios de cercanía no suelen contar con servicio de Posnet para poder efectuar cobros a través de tarjetas de débito o de crédito, lo cual resultaría un inconveniente para lograr que la rebaja del IVA beneficie a quienes realizan compras en esos negocios.

También, Rudnik opinó que el tope de $ 18.800 para la devolución del IVA es “bajo”. Sin embargo, valoró que en los sectores de menores ingresos ese monto será “una ayuda”, y que la eliminación del Impuesto a las Ganancias para la mayoría de los trabajadores generará una “dinamización” del consumo en la franja de personas beneficiadas con esa medida nacional.