En un mundo donde cambian los paradigmas económicos y sociales a raíz de la pandemia y se produce un reordenamiento a partir de nuevas reglas que se imponen en el comercio en todo el mundo, el rol de las empresas también cambia. Pero el cambio sustancial que se está dando y debe fortalecerse, es el rol de la mujer al frente de una empresa.
Ya se ha terminado el mito de los hombres empresarios y una mujer en roles secundarios administrativos. La mujer se hace cargo de las empresas y lo vemos con mejor claridad en las PyMEs regionales, donde cada vez más el puesto de liderazgo está a cargo de una mujer.
La mujer le imprime a su gestión la innovación en las estrategias empresariales, prepara mejor el desempeño y utilización de los recursos estratégicos y redirecciona los alcances de esos recursos hacia objetivos prácticos posibles e incluso se plantean inéditos viables, como parte de la vocación transformadora de la mujer en la empresa.
Desde siempre hemos apoyado desde la Federación Económica de Formosa, la participación de la mujer empresaria en roles del gremialismo empresario, donde tenemos ejemplos claros de actuación en Cámaras y Asociaciones que conforman nuestra organización empresarial.
A este 5° Congreso Internacional “Mujeres con Valor”, le debemos añadir “Mujeres de Valor”, porque constituyen el fundamento, la base, desde donde proyectarnos. La participación de la mujer en una PyME hoy, permite construir el presente de una nueva dirigencia empresarial, para visualizar un futuro de mayor igualdad, de mejores oportunidades para todos y principalmente poder levantar un mundo más inclusivo y mucho más solidario.