Se trata de Marta Salina, conocida como "Kuñá Mbareté". "Siempre que alguien recurría a ella, encontraba alguna solución a su problema", reflexionó el intendente Manuel Celauro
CLORINDA (de n/agencia) - Muy prematuramente, apenas días después de haber cumplido 50 años, la muerte sorprendió a la reconocida dirigente peronista Marta Mabel Salina, quien a horas tempranas, como todos los días, había saludado a sus contactos de WhatsApp, hasta que cerca de las 10 de la mañana del día 9 de agosto, un infarto le provocó la muerte de manera súbita. El hecho causó una gran consternación entre sus familiares, amigos y conocidos.
Descrita como de carácter fuerte y frontal, "las virtudes que signaron la vida de Marta fueron la solidaridad y sensibilidad hacia los más necesitados".
Nota completa en la edición impresa del 13/08