Un vigilante de seguridad y experto tirador que había manifestado su intención de matar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha sido detenido en una pueblo cercano a Barcelona, indicó este jueves la fuerza de policía de Cataluña.
Los Mossos d'Esquadra, fuerzas de seguridad en esta región de España, confirmaron a través de Twitter la detención de esta persona, considerada un experto tirador y en cuyo domicilio fue hallado "un arsenal de armas", en el pueblo de Tarrasa.
El motivo que alegaba el ya arrestado para matar al socialista Sánchez es el proyecto del Ejecutivo español de exhumar los restos del dictador Francisco Franco de su actual tumba en un monumento conocido como Valle de los Caídos.
Fuentes del Ministerio del Interior han informado a EFE de que el tirador ya está en prisión.
Según informó este jueves el diario digital Público, la detención se produjo hace unas semanas y el vigilante, Manuel Murillo Sánchez, de 63 años y con un historial de problemas psicológicos, ingresó en prisión acusado de una "proposición de homicidio de autoridad", con "tenencia ilícita" de un "depósito de armas", por orden del Juzgado de Instrucción número 3 de Tarrasa.
El detenido es un experto tirador, el mejor del club de tiro olímpico del Vallés, en el que practicaba y competía desde hacía muchos años, y era capaz de modificar y construir armas cortas o largas, según Público.
El francotirador tenía un arsenal peligrosos e ilegal que incluía cuatro fusiles de precisión (como el de arriba), un fusil militar de asalto Cetme (abajo, izquierda) y una subametralladora Skorpion vz.61 (abajo, derecha)
Murillo Sánchez se indignó cuando el Gobierno comunicó su intención de exhumar del Valle de los Caídos los restos de Francisco Franco, al que el vigilante admiraba, y empezó a buscar cómplices para acabar con ese "rojo de mierda", en referencia a Sánchez, en un grupo reducido de WhatsApp.
Fue una usuaria del chat la que dio la voz de alarma sobre las intenciones de Murillo Sánchez cuando pasó de los insultos y amenazas contra el líder del PSOE a solicitar apoyo logístico para cometer un atentado contra Sánchez, aprovechando su pericia como francotirador y su arsenal.
La Policía solicitó una orden de entrada y registro del domicilio de Murillo Sánchez, donde el pasado 19 de septiembre hallaron 16 armas de fuego cortas y largas, incluido un fusil de asalto militar Cetme, un subfusil ametrallador checoslovaco Skorpion vz. 61, cuatro rifles de alta precisión y dos pistolas, una de estas modificada ilegalmente.
El arsenal completo que poseía el francotirador era extremadamente peligroso. En el caso del fusil de asalto Cetme y la subametralladora Skorpion vz.61, se trata de armas de tiro automático prohibidas por la legislación española.
Pero además el Cetme, antiguo fusil del ejército español, dispara una munición de guerra de alto poder, mientras que la vz.61 es un arma de dimensiones reducidas que puede ser fácilmente escondida en la ropa y que, por su alta cadencia de tiro de 850 disparos por minuto, puede resultar devastadora si es usada en medio de una muchedumbre.
En el caso de los cuatro fusiles de precisión, se trata de las armas típicas de los francotiradores, pero también se utilizan para la caza mayor y por tanto su tenencia es legal en España.
Discurso de Sánchez ante el parlamento español
Sin embargo, en el caso potencial de un magnicidio serían problablemente las armas elegidas por un experto tirador, ya son capaces de acertar con precisión un blanco a una distancia de hasta 1.500 metros.
El detenido frecuentaba ambientes ultraderechistas, pero nunca había participado en actos violentos, por lo que no tenía antecedentes policiales y no estaba controlado por las fuerzas de seguridad.