Hoy traigo para mis queridos lectores una herramienta para procesos de cambio, estadios que atravesamos las personas de cara a cualquier tipo cambio. Su autor es el investigador y psicólogo sueco Claes Jannsen.
Así como el tiempo cambia constantemente, nosotros y los escenarios en que nos movemos también cambian.
Esta herramienta tiene la finalidad de ser una orientación. ¿Dónde estamos parados? ¿Con qué formas de pensar, sentir y actuar atravesamos las diferentes circunstancias de los cambios que nos toca atravesar?
“Las cuatro habitaciones del cambio” de Claes Jannsen es una guía clara y concreta considerada por muchos como una de las teorías psicológicas más útiles, prácticas y fáciles para comprendernos, para abordar el cambio en relación con alguna cuestión o tema concreto.
Modelo que describe los procesos de cambio como un movimiento circular concatenado, una especie de viaje que recorre cuatro estados psicológicos en que vive el individuo:
1- Satisfacción; 2- Resistencia; 3-Confusión, 4- Innovación.
Primera habitación: la habitación de la SATISFACCIÓN
Tendencia: cuidar lo conocido. Es suficiente así como estoy o están las cosas. No quiero cambiar porque estoy satisfecho con lo que tengo y como estoy o como funciono, me siento cómodo y satisfecho, hay una tendencia a querer quedar aquí.
También puede ser que, aunque no me encuentre a gusto, no me encuentre bien en la situación que estoy respecto al tema, no me plantee cambiar o estoy mal, pero acostumbrado a lo conocido.
La segunda habitación: llamada de la NEGACIÓN y RESISTENCIA
Tendencia: resistencia-negación al cambio. No quiero ver que no funciona lo actual. Me resisto a cambiar. Tengo miedo a perder lo que soy o represento, lo que sé o lo que conseguí, entonces encuentro dificultades para cambiar. Me niego a cambiar y sigo protegiendo cómo hago las cosas.
La tercera habitación: la de la CONFUSIÓN
Tendencia: Necesidad de aclarar. Se experimenta desajuste, tensión, conflicto interno. Sentimientos de vértigo, inferioridad, aislamiento, dudas, caos conflicto interno, inadaptación.
Puede que quiera cambiar, que me plantee y decida incorporar cambios, pero no sé muy bien cómo ni hacia dónde hacerlo.
Me encuentro confundido, con dudas, necesito aclararme para dejar de hacer lo que conozco.
Algo está mal aquí y ahora, no sé qué, y ahora cómo sigo, y no sé qué hacer o cómo hacer. Inquietudes sobre qué aspectos debo aclarar e integrar, qué competencia o habilidad necesito desarrollar a partir del cambio específico.
Aparece el deseo interno de sí al cambio y de transitar lo desconocido. ¿Qué debo cambiar y soltar? Se busca ubicarse en nuevos contextos y realidades.
La cuarta habitación: la de INNOVACIÓN, también llamada RENOVACIÓN
Tendencia: Probar-innovar. Tengo ganas de moverme y asumir “la espiral del cambio”.
Se busca probar, testear, renovar, desde la experimentación, hay compromiso creativo, sostener lo que aporta valor. Ganas de que las cosas pasen. Ideas radicales y novedosas. Cambio creativo. Integración, juntar todo, unir partes que cristalizan la experiencia. Saber qué hacer, haciendo cosas diferentes a las que se hacían.
Resumiendo: “El cambio es un proceso dinámico que puede ser rápido o extremadamente lento, es un proceso circular, que en realidad nuca se acaba y que se mueve a través de las cuatro habitaciones en un movimiento de espiral que termina y vuelve a comenzar.
Para cambiar, se necesita dejar atrás las resistencias (RESISTENCIA) y aceptar que cuando estamos cambiando, no todo está claro, que podemos estar confusos (CONFUSIÓN), y a partir de aquí podemos empezar a hacer cosas, a comprometernos a probar a hacer algo (INNOVACIÓN). Y una vez que ya haya hecho el cambio, estaré satisfecho (SATISFACCIÓN). Probablemente esta satisfacción durará por un tiempo.
El proceso de movimiento entre las habitaciones va en la siguiente dirección:
- 1) SATISFACCIÓN a RESISTENCIA.
- 2) RESISTENCIA a CONFUSIÓN.
- 3) CONFUSIÓN a INNOVACIÓN.
- 4) INNOVACIÓN a SATISFACCIÓN.
Para pasar de una habitación a otra, necesito saber dónde estoy y qué hacer. Y para poder hacerlo hay que abrir una puerta imaginaria que nos posibilita pasar. Y para abrir la puerta se necesita una llave. Y la llave se obtiene respondiendo a las preguntas adecuadas.
- Para pasar de la habitación de la SATISFACCIÓN a la de la RESISTENCIA, la pregunta llave es: ¿Ya tengo suficiente de esto?
- Para pasar de la habitación de la RESISTENCIA a la de la CONFUSIÓN, la pregunta llave es: ¿Qué es lo que todavía no acepto y necesitaría hacerlo?
- Para pasar de la habitación de la CONFUSIÓN a la de la INNOVACIÓN, la pregunta llave es: ¿Qué es lo que tengo que soltar, que dejar ir?
- Para pasar de la habitación de la INNOVACIÓN a la de la SATISFACCIÓN, la pregunta llave es: ¿Con qué puedo comprometerme?
Preguntas que aportan una información valiosa, que pueden establecer las acciones que han de realizarse para ir avanzando a través de las habitaciones y conseguir impulsar el cambio en el proyecto o tema que se trate.