Después de que se conociera que Flybondi deberá dejar dos de sus 12 aviones en tierra por retrasos en el pago de los leasings por la falta de autorización para girar dólares al exterior en el marco del Sirase (Sistema de Importaciones de la República Argentina y Pago de Servicios al Exterior), desde el Gobierno respondieron que la low cost “no puede pretender acceder de manera directa a un tipo de cambio a través del MULC mientras venden pasajes y aprovechan esa diferencia para no utilizar financiamiento propio”.
“La empresa pasó de tener seis aviones a sumar 12. Ahora quiere seguir creciendo y ahí somos claros: no hay problema en que crezca, pero debe hacerlo con financiamiento propio, porque hay un stress en las reservas que el Estado debe administrar atendiendo prioridades y necesidades de diversos sectores”, afirmaron fuentes de Gobierno y agregaron que, si no es con financiamiento propio, pueden hacerlo cargando Sirase a plazo, como hacen los medicamentos por ejemplo (a 60 días).
“Esto ya lo entendió la empresa, que habiendo cargado Sirase por un valor inadecuado, ahora las está anulando y volviendo a cargar por un valor más ajustado a sus necesidades reales”, completaron.
Con respecto a los pagos de leasing y otros servicios al exterior, dijeron que por esta situación se conformó una mesa de trabajo entre la Secretaría de Comercio, el Ministerio de Transporte, el Ministerio de Turismo, la AFIP, el Banco Central y la ANAC para dar seguimiento a la evolución de los pagos del costo por avión que tiene la empresa.
En este sentido, estaría en elaboración un informe de ANAC al respecto para ver si el giro de divisas corresponde con los costos del mantenimiento de la flota.
Por el inconveniente, Flybondi informó que deberá cancelar al menos 22 vuelos. “La compañía no descarta más cancelaciones y demoras en el servicio si la situación no se normaliza”, afirmó en un comunicado oficial. “Flybondi, que viene realizando todas las acciones requeridas por los organismos, confía en que la situación se resuelva de forma favorable lo más pronto posible y que el proceso de aprobaciones tenga la agilidad y celeridad que la industria aerocomercial necesita para poder cumplir con los pasajeros y los proveedores”, agregó en el texto.
Según el documento, el problema radica en que la compañía no cuenta con el aval mensual para girar pagos al exterior por el leasing en el marco del Sirase y en que el 70% de los costos de la aerolínea son en dólares. Esos dos aviones que deberán quedar inactivos, en tierra, obligaron a la empresa a cancelar 22 vuelos y demorar otros 10.
“Actualmente, existen medidas oficiales que son restrictivas para las empresas que necesitan acceder a moneda extranjera para realizar pagos al exterior. En Flybondi contratamos varios servicios especializados afuera que se pagan en dólares. Para poder hacerlo debemos pedir autorización periódicamente, pero en los últimos dos meses no recibimos las aprobaciones”, indicó la empresa.
Asimismo, informó a los usuarios afectados que, “por razones ajenas a la compañía”, tuvo que “realizar ajustes operativos”. Los mismos implican no solo “cambios de horario en vuelos”, sino también “dejar de operar una parte menor” de la flota.
Actualmente, la aerolínea low cost, que ya lleva más de cinco años operando en el país, tiene el 21% de cuota del mercado doméstico y transporta a más de 300.000 personas por mes. Cuenta con 23 rutas operativas: 16 domésticas desde y hacia Buenos Aires, cuatro interprovinciales y tres internacionales a Brasil.