Una misión técnica del Banco de Desarrollo para América Latina (CAF) llegó a Formosa en el marco de la financiación del Acueducto para el Desarrollo Social y Productivo de la ruta 86. Fueron recibidos por el ministro de Economía, Hacienda y Finanzas de Formosa, Jorge Ibáñez; la coordinadora ejecutiva de la Unidad Central de Administración de Programas (UCAP), Stella Maris Manzur; y equipos técnicos del Ministerio de Economía y de Obras Públicas de la Nación. A las reuniones realizadas se sumó el recorrido por los puntos estratégicos del acueducto.

En la oportunidad se informó una serie de puntos como parte de la evaluación del proyecto a nivel socioambiental y financiero. Asimismo, se proyecta un seguimiento una vez concretado el acueducto.

Posteriormente, la misión técnica recorrió todos los puntos estratégicos donde se fijará la traza del acueducto: las localidades de Clorinda, Laguna Blanca y Misión Tacaaglé. En estas últimas dos ciudades, además, los visitantes pudieron conocer dos importantes acciones provinciales, como son la Universidad Provincial de Laguna Blanca y el Centro de Validación de Tecnologías Agropecuarias (CEDEVA).

De esta manera, la misión técnica -encabezada por Álvaro Aguillo Fidalgo- informó cómo será la traza que tendrá el acueducto y las zonas que beneficiará la concreción del mismo.

El acueducto estará sobre la traza de la ruta 86 y se conectará desde Clorinda hacia Villa General Güemes, para transportar agua del río Paraguay. Se busca llegar a distintas áreas productivas y planea beneficiar a 50.000 personas, que se ubican en zonas aledañas a las rutas N° 86, 6 y 2, es decir, un total de 40.000 hectáreas. Al posibilitar el riego en aquellas áreas y asegurar el abastecimiento del agua, se potenciará la producción agrícola y ganadera.

Desde un principio, el proyecto ya evidenció un trabajo coordinado entre el Gobierno provincial y la Presidencia de la Nación, siendo anunciado en febrero por el gobernador de Formosa, Gildo Insfrán, y el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa.

La obra tiene un plazo estimado de ejecución de cuatro años y contará con un financiamiento de 250 millones de dólares, de los cuales 200 serán aportados por el Banco de Desarrollo de América Latina, y 50 millones de dólares como contrapartida local.

El Banco de Desarrollo de América Latina, en ese sentido, tiene previsto financiar proyectos que promuevan la seguridad hídrica en América Latina y el Caribe, por un monto de USD5.000 millones.