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“30 CENTAVOS” CELEBRA SUS 20 AÑOS CON EL LANZAMIENTO DE “LA REALIDAD NO EXISTE”

Dos hombres en un jardín: dos jardines

* Por Héctor Washington



La frase que encabeza esta nota pertenece a un proverbio árabe que se propone invitar a reflexionar acerca de la realidad en tanto construcción subjetiva derivada de la información que recibimos del entorno. Expuesta a innumerables factores que determinan nuestra historia personal y nuestra propia percepción de los hechos, podemos concluir deliberadamente en que la realidad no es más -ni menos- que nuestras propias conclusiones acerca de lo que vemos o percibimos del mundo y que además existen tantas realidades como individuos se propongan crearla y recrealra desde el pensamiento.

Sin ánimos de entrar demasiado en disquisiciones kantianas ni en recovecos filosóficos que nos alejen del foco, la premisa tiene anclaje en un terreno concreto: la expresión de una mirada contracultural que nace de las inquietudes artísticas de un grupo de jóvenes que vienen haciendo música desde hace 20 años.

“30 Centavos”, banda formoseña de punk rock en esencia pero que se dispone a experimentar de forma permanente con nuevos sonidos y mixturas, acaba de dar a conocer “La realidad no existe”, una primera muestra de una serie de lanzamientos que irán sucediéndose a lo largo de este año y que refleja las inquietudes de sus integrantes en torno a los últimos sucesos devenidos de la pandemia y su consecuente aislamiento: “En ese momento, nos estábamos reencontrando entre amigos, haciendo lo mismo que veníamos haciendo hacía 20 años pero con otra rea-lidad en el frente, con otra forma de existir ante el mundo que no teníamos cuando empezábamos. Y algunas de las cosas que pensábamos antes siguen subsistiendo dentro de nosotros, llevadas a cabo de otra manera. La rebelión hoy por hoy ya no está dada de la misma manera que hace 20 años, pero nosotros sí seguimos sosteniendo esas ideas”, reflexionan en torno a los acontecimientos de orden social y sanitario que supieron marcar al mundo entero.

“Un día, socialmente nos tuvimos que ver peleando de verdad por cosas en las que creíamos. Nos volvimos a encontrar y fue un momento muy fuerte el que vivimos todos al haber estado aislados en un tiempo y no nos dejaran hacer lo que queríamos hacer. En ese momento lo que nos unió y nos reencontró fueron las marchas sucesivas, y en esos encuentros de protesta nos empezamos a hablar en la plaza en esos días”, explican en diálogo con Cronopio.

“La realidad no existe, es sólo una percepción”, repite el estribillo de este nuevo tema que se mueve entre el reggae y algunos pases de hip hop que Guillotina, como artista invitado, desata en una oleada de rimas que retratan esos momentos: “La percepción es un cambio de idea yendo a otra dimensión, es mejor versión cuando saco eso y elijo con todo el corazón”.

Al respecto, se explayan: “Pero el estribillo había nacido por esas cosas que nos habían pasado y que nos encontraban en ese momento haciendo lo mismo pero de diferente manera. Nosotros fuimos también poniendo cada ladrillito para que las cosas fueran sucediendo y hay que poner los ladrillos para moldear la realidad, la realidad que nos quieren vender o nos quieren hacer creer, esa es la que no existe. Porque hay muchas cosas para ver quién tiene razón: el que la construye. Pero la realidad es tuya porque vos la vivís desde esa subjetividad y nadie más puede experimentar ser uno. Además, nosotros ni nos imaginábamos estar con esa realidad después de 20 años”.

Aun así, con todas sus idas y venidas, ponderan en conjunto todo el recorrido de la banda desde el año 2003 en que comenzaron a dar los primeros esbozos que definirían su sonido característico y su impronta contracultural y contranormativa. Y reconocen: “Probablemente nos preguntabas hace 20 años si nos imaginábamos por todo lo que pasamos, y no teníamos idea. Pero hicimos que eso pase porque es lo que pensábamos. Y todo lo que pasó fue muy necesario porque fue lo que hizo que lleguemos hasta acá, como estamos ahora, que es la mejor manera en que podíamos llegar: reafirmando convicciones, y estamos más vigentes que nunca”.

JaJo Ekiz (voz), Juanmi Castellani (guitarra y coros), Juanchi Gauna (guitarra), Santiago Eliasile (bajo) y Fabricio González (batería) celebran estos 20 años de “30 Centavos” -aseguran- “en un momento nuevo; parece que cada 20 años se renueva el ciclo, da vuelta la cosa. También con esas mismas energías que cuando empezamos, a pesar de esos 20 años que pasaron. Estamos con muchos proyectos nuevos y con muchas ganas de seguir haciendo cosas para que ‘30’ se mantenga vigente y que crezca cada vez más”.

Todo se dio, reconocen, entre lo natural y lo buscado, porque se fue acomodando la formación y empezaron a estimular su motor creativo nuevamente luego de algunos años en que la banda estuvo fuera de circuito: “Hubo un tiempo en los 20 años que dejamos de tocar, porque algunos estaban viviendo en otro lado y nos veíamos muy poco. Pero después de ese regreso en ‘Camelot’ en 2016, volvimos a tocar y lo hacemos por lo menos una o dos veces por año”.

Es en este ciclo continuo de escenarios compartidos en que se propusieron celebrar las dos décadas de la banda, “pero aparte de tocar, queríamos sacar algo nuevo. Por otra parte, la estabilidad en la formación hace que también haya un nuevo impulso para decir: ‘Bueno, ya estamos nosotros, tenemos los cimientos como para seguir construyendo’. Y de pronto, nosotros mismos nos sentíamos tocando nuestros recuerdos, por eso decidimos grabar unos temas nuevos. Y compusimos ‘La realidad no existe’ y otro más que va a salir más adelante. Así arrancó la moto otra vez”.

En este largo período que la mantiene en vigencia, la banda supo también mixturar ritmos y estéticas con otras propuestas, tal el caso de artistas de corte urbano como Bleckance y Guillotina en el caso de “La realidad no existe”. Consultados acerca de cómo creen que enriquecen el producto final este tipo de asociaciones creativas, se refirieron al proceso que experimentó el tema hasta llegar al producto final, que se dio a conocer a través de las plataformas el 5 de marzo pasado: “Empezamos a improvisar mientras ensayábamos los temas y a hacer las partes entre todos. Y lo llevamos como a un reggae -que siempre nos gustó mucho-, un reggae de corte ‘Sumo’ -que terminó más en un reggae ‘Todos tus muertos’-. Y en esa búsqueda podríamos haber pensado en un solo de guitarra o de trompeta, como alguna vez experimentamos también con el acordeón. Pero se nos ocurrió otro desafío. Porque es como que el tema va pidiendo cosas y va evolucionando solo, y también al músico le va naciendo la necesidad de probar otros estilos, de probar otros rumbos y también evolucionar como artista”.

Esta búsqueda de una nueva exploración estética es lo que los llevó -sostienen- a “incursionar en otros estilos que también te llevan redescubrirte a vos tocando algo que por ahí no te veías tocando. Y ahí te reencontrás con esa esencia del músico de redescubrirse y construir una nueva manera de ejecutar y sentir la música a través de otro estilo. Por eso se nos ocurrió invitar a un rapero, que es la onda urbana de ahora, lo que está sonando todo el tiempo”.

Estableciendo un paralelo con la nueva ola de artistas urbanos y su método de trabajo, se definen: “Nosotros tenemos la suerte de que no somos cerrados y nos cruzamos varias veces con Guillotina y tocamos juntos. Y además hay muchas cosas que son parecidas a lo que nosotros veníamos haciendo, que es el mismo trabajo que ellos están haciendo: grabando discos en CDs, vendiéndolos en los recitales… Y ellos también nos impulsan a nosotros con la tecnología. El tema salió por el sello de los chicos, ‘712 Studio’. Ellos nos ayudaron y ya teníamos el tema todo terminado. Entonces lo llamamos a Guillotina a grabar y ese día también estaba Bleckance, que terminó produciendo el tema, lo editó, lo masterizó y le agregó esos vientos y esa parte hip hop que tiene”.

Respecto de la experiencia de trabajar con “30 Centavos”, Guillotina analiza: “Estuvo bueno también el choque de generaciones y estilos, porque nos expande a ambas partes y también compartís con los pibes, y aporta un toque de evolución a lo que veníamos haciendo. Así que también creo que por algo nos cruzamos y podemos crear un campo nuevo de oportunidades”.

En este sentido, la banda se propone además derribar del imaginario colectivo el mito de la rivalidad entre artistas de diferente raigambre, y explican: “Pasa mucho en el imaginario que está todo mal entre el rockero y el rapero, y no son más que trabas mentales. Esto demuestra que hay que unirnos para sacar la música de Formosa y ayudarnos entre todos. Esto también la expande hacia otros lugares; en el fondo, tenemos cosas muy similares, la manera en que pensamos y cómo vemos el mundo. Y también hay una cuestión de la ruptura del ego, ya que también necesitás del otro y el otro te enriquece”.

“Yo creo que es una información que estaba viajando, circulando hace un tiempo -dispara Guillotina-, como que a un par nos empezó a caer la ficha de la realidad, como que era bastante moldeable. Y antes de juntamos a grabar el tema, yo me juntaba mucho con Santi (Eliasile). Y a pesar de que vivíamos en barrios distintos, siempre era la misma información, la misma data que nos estaba corriendo. Y cuando caí al departamento de Juanmi (Castellani), escuché la letra y dije: ‘Esta información estaba acá, en la cabeza’. Y empezamos a tirar freestyle y le dimos como una estructura. Me sentí bastante representado y cómodo también a la hora de crear y de cómo creativamente puede fluir”.

En contrapartida, “30 Centavos” retribuye: “También es importante el aporte de estos nuevos artistas, confiando en la nueva era, en esta camada de pendejos que la rompen, que tienen otro ritmo de trabajo, y siempre hay que contagiarse de lo bueno”.

Por estos días se encuentran en el proceso de filmación del videoclip de “La realidad no existe”, que ya estaría rodando en plataformas en las próximas semanas, donde “nos van a encontrar caminando por la selva, por los montes, con mucha naturaleza… y moldeando un poco la realidad”.

Consultados acerca de un futuro a corto plazo, adelantan la celebración de los 20 años como banda: “Después, la idea es sacar el siguiente tema, que es un poco más picante, bien punk rocker, y también va a contar con video. Para mitad de año suponemos que más o menos sale el tema con su correspondiente video; y después, la otra mitad del año, promocionar lo que va a ser la fiesta de fin de año y capaz meter algún otro tema. Esperemos ir sacando estos materiales progresivamente como para tratar de llegar con cosas nuevas a la fiesta de los 20 años que vamos a hacer cerca de fin de año. Queremos hacer un festival y hacer un súper recital”, proyectan.

“La realidad hoy nos encuentra diferente, pero trabajando en lo que nos gusta, que nos llevó mucho tiempo. Uno trata de dedicarse 100% a esto y queremos seguir haciendo arte y tratar de trabajar todo lo posible en este camino”, confiesan eufóricos de seguir recorriendo este camino de la música repleto de jardines -a veces tupidos, a veces yermos- que se multiplican todo el tiempo según el ojo clínico que suele explorarlos desde la contrariedad, la fascinación o el vértigo.



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