CLORINDA (de n/agencia) - Discusiones de fuerte tono se escucharon ayer entre el reducido grupo de originarios que cortaban la ruta nacional 11, a la altura del ACA en Clorinda, y los conductores de decenas de vehículos de todo porte que se encontraban varados a la espera de que se levantara la medida.
“Estoy llevando a una mujer embarazada y no me dejan pasar”, expresaba uno de los conductores que se acercaron hasta los manifestantes para pedirles que les cedieran el paso.
En tanto una mujer trabajadora de la sanidad afectada a la Unidad Penal Nº 5 a la vera de la RN Nº 11, en diálogo con esta Corresponsalía de La Mañana, relató que “se ven largas filas a ambos lados del piquete y no dejan pasar al personal de Salud ni a los enfermos”.
Los principales referentes de esta protesta, los dirigentes Adolfo Nigodik y David Chilliani, habían asegurado que no tenían inconvenientes en dejar pasar a trabajadores esenciales como de los de las áreas de Salud, docentes, de la seguridad y personas que viajen para recibir atención médica.