El licenciado en Teología, profesional en la formación de terapias grupales, especialista en control y tratamiento del estrés y coordinador del Departamento de Educación para la Salud del Sanatorio Adventista del Plata (Puiggari, Entre Ríos) Daniel Wengrovsky dictará este jueves a las 20 horas una charla sobre “herramientas para cuidar tu salud emocional”, en el Hotel Howard Johnson, de esta ciudad.
Durante una entrevista con La Mañana, Wengrovsky comentó que esta actividad organizada por el Sanatorio Adventista del Plata, OSDE, el Sanatorio Adventista de Formosa y el Hotel Howard Johnson es con entrada libre y gratuita, y tiene por objetivo educar en salud emocional.
“No son herramientas mágicas las que vamos a compartir con la gente. Tampoco con ideas extraordinarias. En realidad, lo que vamos a hacer es abrir el cajón y encontrar la cajita de herramientas que todos tenemos en el corazón y la mente para utilizarlas. A veces no lo hacemos por el estrés y las preocupaciones, y hay tener cuidado, porque si se prolongan en el tiempo se puede producir un desgaste emocional y tarde o temprano e cuerpo comienza evidenciar problemas físicos de salud”, expresó.
Señaló que la pandemia vino a profundizar esa situación porque una porción importante de la comunidad ya venía con un marcado desgaste emocional desde antes. “Si bien ya vivimos ahora cierta normalidad, emocionalmente nos quedamos empantanados. Lo que queremos es encontrar esas herramientas, recordarlas, darle valor, utilizarlas, cuidarnos y recuperarnos en términos emocionales porque la vida sigue”, sostuvo.
Actitudes
Anticipó que quienes participen de la charla se encontrarán con “actitudes” (no aptitudes) con las cuales conviene pararse ante la vida y la realidad porque en ocasiones el viento no sopla a favor.
“Aquí es importante ver la forma en que nos paramos para jugar el juego de la vida. A un equipo mal parado en la cancha lo pasan por encima y no pasa por el talento de los jugadores sino por cómo se pararon en el campo. Un equipo mal distribuido representa una estrategia equivocada y te comes una goleada. No siempre es cuestión de talento, de inteligencia ni de títulos académicos. Lo importante es la forma en que me paro para enfrentar la vida con entereza, dignidad, autoestima, valentía, coraje y resiliencia para superarla en la medida que podamos, sin perder en el camino alegría de vivir”, concluyó.