Daniel tiene 31 años, estudia Licenciatura en Obstetricia en la Facultad de la Salud de la Universidad Nacional de Formosa (UNaF) y hoy encontró 100.000 pesos en la vía pública y los devolvió.
La muestra de honradez es todo un ejemplo de vida en medio de una sociedad que pareciera estar cada vez más contaminada por la falta de valores, la estafa, la mal entendida viveza criolla y los inescrupulosos que intentan sacar provecho de cualquier situación.
Durante una entrevista con La Mañana, Daniel comentó que vive en el barrio República Argentina con su madre, tienen un almacén y al igual que muchas familias formoseñas también se ven afectados por la crisis económica, pero animados por la esperanza, la fe, el esfuerzo y el sacrificio para salir adelante.
A primera hora de la mañana de este viernes fue a la Terminal de Ómnibus de Formosa para averiguar precios de pasajes y después caminó en dirección a la ANSeS y una de las sucursales del Banco de Formosa, sobre la avenida Gutnisky, donde encontró un sobre tirado con 100.000 pesos y estudios médicos.
De inmediato tomó el sobre y publicó en sus redes sociales el hallazgo para devolverlo a quien lo perdió. En cuestión de minutos, varias personas se comunicaron con él, incluso algunos que intentaron aprovecharse de la situación para quedarse con el dinero. “Encontré el sobre entre las 7 y las 7.30 horas y tenía unos estudios médicos y se notaba que la persona había sacado un préstamo. Había 100.000 pesos. Me contacté con la dueña del dinero, que es una vecina de Villa del Carmen y tiene toda la documentación. Pero antes me llamaron varios que decían ser los dueños, pero cuando comenzaba a indagar más cortaban la comunicación”, relató.
El joven dio una verdadera lección de honradez y dijo que, si bien se vive una situación económica compleja y las necesidades son muchas, nada justifica apropiarse o quedarse con el dinero ajeno.
“Actué como debía y esto no tendría que ser motivo de sorpresa ni admiración. Cuando uno encuentra algo, lo correcto es devolverlo. A cualquiera le puede pasar perder algo y sería bueno que alguien te lo regrese. No quiero recompensa por esto porque soy de los que creen que si uno obra en buena forma, te va bien. Esto lo aprendí de mi mamá y de la experiencia que tiene.
A veces nos quejamos de muchas cosas y después te das cuenta que hay personas que están peor que uno. Hay que valorar lo que tenemos, sea poco o mucho. Me toca ver compañeros en la Universidad que no cenan porque no tienen nada para comer. Hay que aprender a dar gracias y a valorar”, concluyó.