Tras las intensas lluvias, la ciudad atraviesa por una invasión de mosquitos. Consultado por La Mañana en vivo, el jefe del Departamento de Control de Vectores y Zoonosis del Ministerio de Desarrollo Humano, Alejandro Romero, explicó que el brote se debe al contexto climático y pidió a la comunidad que deseche aquellos objetos que puedan acumular agua para evitar la proliferación del Aedes Aegypti, el mosquito que transmite el Dengue.
“Durante los meses de enero y febrero tuvimos una temporada muy seca, prácticamente no llovía y eran condiciones desfavorables para los mosquitos. Ante las situaciones adversas, los mosquitos tienen detenido su ciclo, cuando las condiciones de temperatura, humedad y lluvias son adecuadas -como ahora- se activa el ciclo del mosquito que se encontraba en pausa”, detalló.
Según explicó Romero, de 7 a 10 días el mosquito ya es adulto, y los ejemplares que hay en la ciudad de Formosa son el Aedes Aegypti, Culex y Sorofora.
En este sentido, recordó que, para reproducirse, el mosquito necesita de lugares que acumulen agua, tanto dentro como fuera de la casa, en el patio, balcón o jardín, y alertó que tras las lluvias se incrementan la presencia de criaderos en los hogares: “Hay que eliminar tapitas de gaseosas, las botellas que están hacia arriba, los juguetes, elementos de construcción en patios, etcétera”.
Finalmente, contó que “la mayor preocupación es el Aedes” y detalló que la fumigación “tiene un efecto temporal”, por eso instó a la comunidad a colaborar con la limpieza y descacharrado casa por casa.