El mini básquet de la provincia se reunió en Laguna Blanca para vivir un encuentro que convocó a clubes de diferentes puntos de Formosa. Una jornada llena de diversión que tuvo el extra de la visita del plantel profesional de La Unión de Formosa.
El Polideportivo de Laguna Blanca fue el lugar elegido para que los clubes de básquet de toda la provincia vuelvan a verse las caras después de tanto tiempo. Un momento muy esperado y deseado también para los grandes, los dirigentes que trabajan en los clubes y los entrenadores que sin sus chicos en la cancha extrañaron tanto como los protagonistas principales.
Como ya ocurrió en ocasiones anteriores, Laguna Blanca fue gran anfitrión a partir del trabajo que hacen para con el deporte desde el Municipio. En esa idea viene trabajando con escuelas municipales en diferentes deportes y una de ellas es la de básquet. Además, a Laguna Blanca, por estos tiempos, le toca vivir una situación muy especial, ya que uno de los jugadores que se inició en el básquet en su escuela hoy es integrante del plantel de La Unión de Formosa. Entonces ver a “su” Marcos González llegando al lugar que lo vio nacer como parte del equipo sin dudas que es una enorme satisfacción tal como lo hicieron ver las autoridades locales que lo homenajearon con una plaqueta y con mucha calidez.
El encuentro de mini se extendió por toda la jornada del sábado con una pequeña interrupción para la parte formal que se dio con la llegada de La Unión de Formosa. Después de las palabras de rigor, los saludos y los aplausos, los mini y los profesionales saltaron a la cancha para jugar juntos. Claro que en el camino, como tanto se da en estos tiempos, hubo muchas mamás, papás, entrenadores y voluntarios para el “¿me sacás una foto?” de los chicos. La misión era quedarse con un recuerdo de este día donde pudieron compartir la pelota naranja con los jugadores profesionales. Hubo otros que tuvieron más suerte aún, ya que se quedaron con algunas de las camisetas de La Unión que se sortearon. Pero toda esa atracción fue sólo una parte de la gran jornada de básquet que vivieron los chicos. El resto fue jugar, jugar y jugar, contra todos los equipos que estuvieron, con la filosofía de siempre que tiene el mini, donde lo que menos interesa es el resultado final. En Laguna Blanca, por un día Laguna “Básquet”, todos fueron ganadores.