El titular de la Cámara de Estaciones de Servicio y Afines del Norte, Faruk Jalaf, aseguró que habrá quiebres de stock y faltante de combustible cuando se habilite el paso vecinal fronterizo, a raíz de las ventajas comparativas de comprar con moneda extranjera en relación a la devaluación del peso.
“Cuando la frontera se libere, seguro va a faltar combustible. Esta película nosotros ya la hemos vivido. Esta será la tercera ocasión: ocurrió entre el 2001 y 2003, de nuevo en 2008 y pasará nuevamente ahora”, comentó Jalaf a La Mañana.
Durante una entrevista, el referente regional del sector sostuvo que no sólo habrá escasez de combustibles, sino también de productos comestibles y prendas de vestir.
“Esto es porque nuestra moneda está muy devaluada y a los extranjeros les resulta más económico venir a comprar acá. La moneda extranjera está fuerte en relación al peso argentino y todo les sale más barato. En Brasil y Paraguay, el precio de la nafta súper está por lo menos un 100% más caro que en Argentina. El combustible cuesta en Argentina la mitad del valor para los extranjeros. Se vende a entre 190 y más de 200 pesos el litro”, señaló.
Remarcó que las petroleras ya establecieron cupos a los surtidores, lo que significa que no comercializarán más que determinada cantidad.
“Estamos hablando de un combustible que está a un precio muy por debajo de lo que tienen los países vecinos. Al haber un tránsito más fluido en los pasos fronterizos entre países limítrofes, que ahora está restringido, aumentará la demanda de extranjeros en gran número”, insistió.
Reconoció que lamentablemente las expendedoras de combustible no tienen competencia porque el problema es nacional.
Devaluación
Entendió que el inconveniente real es la devaluación que sufre día a día la moneda argentina, porque se emite mucho sin tener respaldo económico ni político.
“Las autoridades del Gobierno nacional se pelean entre ellas y eso no es saludable para la economía, porque no nos hace un país creíble. Lo que vamos a ver seguramente son filas enormes para cargar combustible. El propietario de una estación de servicio no maneja ni el precio ni la capacidad de entrega”, señaló.
“Ya nos advirtieron las petroleras que recibiremos menos cantidad, hasta un 50% menos, pero te venden por el canal mayorista más caro. Y eso no lo podemos vender por el surtidor. Nos usan como elemento de presión para que el Gobierno levante los precios. A veces me gano enemigos entre las petroleras por decir esto pero es la verdad”, concluyó.