El 12 de octubre se recuerda como último día de la libertad, último día en que los pueblos originarios fuimos libres y sometidos a un brutal y sangriento proceso de conquista por la llegada de europeos.
Fue Cristóbal Colón el autor intelectual y material de un hecho horroroso, terrible, donde causó muchas muertes y muchas angustias queriendo avanzar su sueño tan equivocado y queriendo borrar de la faz de la tierra a un pueblo innumerable que habitaba y aún seguimos habitando en esta parte del planeta.
Se cobró más de 80 millones de habitantes del territorio original, pero con ese proceso de liquidar, de exterminar a los habitantes legítimos de esta parte del mundo se puso en marcha un proceso de lucha, lleno de esperanzas, con nuestros líderes, grandes héroes que han sabido mantenerse en la historia durante siglos y que se han cargado con la vida por un pueblo lleno de dolor y para un pueblo lleno de esperanzas.
Entre, y durante esos siglos de matanzas de pueblos originarios por parte de pueblos venidos de otros lados, se encontraban firmes por la causa nuestros líderes Qom Meguesoxochi, Taigoyi, entre otros, que los mismos fueron capturados a cambio de que dejen en paz a su “pueblo”.
Por eso no se festeja el Día de la Raza, como se decía anteriormente, no podemos estar celebrando el saqueo, la muerte, la dominación que supuso la llegada de los imperialistas.
Cada 12 de octubre, para nosotros es un día clave de oportunidad para la reivindicación de nuestros derechos y de quienes nos antecedieron en esta tierra; y sostenemos porque entendemos que la revolución es como un método de resistencia ante el mismo imperialismo que buscó destruir nuestra historia, nuestra costumbre, nuestra cosmovisión, nuestra espiritualidad y nuestro territorio.
Gracias a la vida y a la lucha se pudo cambiar, de “Día de la Raza” a “Día del Respeto a la Diversidad Cultural”, concepto íntimamente relacionado con los significados de identidad cultural, interculturalidad y multiculturalidad que implican el contacto entre diversas lenguas, religión, valores y cosmovisiones.
Estos conocimientos o nuevos métodos podrían enriquecer el capital de un país o región; encontrar estos valores es encontrar una riqueza.