El Senado avanzó, este miercoles, con el tratamiento del proyecto de la ley que rebaja las tarifas del gas para residentes de las llamadas zonas frías país, e incluye en el beneficio a más de tres millones de usuarios.

La iniciativa fue analizada, esta tarde, en el plenario de las comisiones de Minería, Energía y Combustibles y de Presupuesto y Hacienda de la Cámara Alta. Allí, el interventor del Enargas, Federico Bernal, explicó la propuesta, que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados.

Al respecto, el presidente del bloque de senadores y senadoras nacionales del Frente de Todos, José Mayans, respaldó la iniciativa al señalar que la misma “responde una mirada estratégica del país”, que tiene el oficialismo, y que apunta al “desarrollo económico y social” de la Argentina.

En cambio, recordó que, durante el gobierno anterior, “había una visión opuesta”. Sin contemplar el impacto social, se aumentaron las tarifas de los servicios públicos, a niveles siderales del 3000 por ciento y las tarifas fueron se dolarizadas, en ese período. “Todo ello afectó el consumo domiciliario, industrial y comercial”, explicó el formoseño, al remarcar que el macrismo gobernó sin tener en cuenta el mapa social. En esos cuatro años de gestión, consignó, “se registro una fuerte transferencia de recursos desde el sector trabajador al sector empresario”.

“El criterio de un país más justo es que cada argentino, viva donde viva, tenga acceso a los servicios públicos, y que se entienda a dichos servicios públicos como un derecho social”, postuló.

También, consideró “indispensable” mantener “un criterio de distribución justa en todo el país, tanto de la energía eléctrica como del gas”. Opinó que ese objetivo se puede concretar si se desarrollan “obras estratégicas” y se alcanza “la oferta suficiente de energía eléctrica y de gas, como para que tener un servicio público que llegue a todo el país”.

Tras expresar el respaldo del bloque al proyecto de ampliación del régimen de zonas frías, aclaró que también está en carpeta impulsar “un proyecto de ley para las zonas cálidas, referido a la energía eléctrica, donde el uso del aire acondicionado a veces salva vidas y no es un tema de lujo, en un región donde se registran altas temperaturas”.

Mayans aprovechó para recordar que, cuando la Alianza dejó el gobierno en 2001, “la Argentina tenía un déficit en materia energética muy fuerte, la potencia instalada de energía eléctrica era algo así como de 18 mil megavatios, y Cristina Fernández de Kirchner finalizó su gestión con casi 30 mil megavatios”. Esa casi duplicación de la potencia instalada se debió a la existencia de “un programa estratégico en materia del servicio de energía eléctrica y del gas”, comentó el senador peronista.

“En las provincias del Norte, por ejemplo, la distribución del sistema de energía por redes de alta tensión de 500 kilovoltios alcanzó más de 5.000 kilómetros en nuestro gobierno”, reseñó. Después, mencionó lo vivido con el gasoducto NEA-NOA, iniciado por el gobierno de Néstor Kirchner y paralizado en la gestión de Juntos por el Cambio, cuando estaba en el 82 por ciento de ejecución. “Fue un daño muy grande”, reflexionó Mayans.

Destacó, luego, que la Administración del FdT reactivó la obra referida, lo que consideró una “muestra de la visión estrategia que tiene el gobierno nacional”, y dijo que significa “un beneficio muy importante para Formosa, Chaco, norte de Santa Fe, Corrientes, Misiones, norte de Entre Ríos también”.

Por su parte, Bernal explicó que, con la ampliación del régimen, “se incluirán a 3,1 millones de hogares”, que tendrán el beneficio de una tarifa de gas más barata. La reducción, según el funcionario, será paulatina y del orden del 30 al 50 por ciento del valor de la tarifa.

De acuerdo con el interventor del Enargas, con la ampliación se suman cinco provincias y 152 departamentos, con lo cual se alcanzará un total de 15 provincias y 231 departamentos que percibirán la mejora.

“Más que llevar salud a la balanza comercial o definir la capacidad exportadora, el objetivo de un sistema energético, y específicamente de un servicio público, debería ser llevarle salud al pueblo argentino”, sentenció Bernal, al responder una consulta de una senadora de oposición. Y acometió: “Lo que vemos es que, durante los cuatro años del gobierno anterior, el pueblo argentino fue empobrecido energéticamente. Como decía, más de tres millones de hogares empobrecidos, impedidos, excluidos de pagar un servicio público; y eso se terminó con la asunción del nuevo gobierno”, completó.

Después, insistió en que “durante el gobierno de Macri se dolarizó, en 2018, el servicio público, a través del precio del gas”, y que, además, “se estatizó la deuda, que se generó entre distribuidoras y productoras, como consecuencia de esa dolarización y de esa mega-devaluación, incontrolada por ese gobierno”, completó el funcionario.