LAGUNA NAINECK – El director titular del Distrito 1 de FAA, Pánfilo Ayala, en diálogo con La Mañana reconoció que “si bien cualquier posibilidad comercial que pueda tener el pequeño productor es importante, el Gobierno no puede tomar como bandera los programas que tiene el PAIPPA, porque no tiene un efecto positivo”. En ese sentido, recalcó, a modo de ejemplo, que “el programa de compra de productos primarios ni siquiera adquiere un 5% de lo que producimos en las chacras”.
Es más, aseguró que algunos sujetos agrarios esperan entre 20 días y dos meses para poder cobrar “los 20 a 50 mil pesos de producción de melón o verdeo” que entregaron al programa y que esto genera “un gran quebranto al productor por la situación económica”.
Asimismo, el referente de la FAA consignó que ese dato concluye que “es un programa insuficiente y no nos sirve que el Gobierno apunte a él y haga discurso político sobre lo que es el PAIPPA como bandera, cuando faltan programas concretos, productivos, con créditos y políticas de certidumbre que tengan que ver con la comercialización y no giren sólo en pequeños programas que son sólo cascara y no tienen efecto positivo para el productor”.
Principales inconvenientes
Durante la entrevista, Ayala consignó que desde el inicio mismo de la pandemia fueron adaptándose al protocolo sanitario “para poder seguir trabajando como esenciales; enfrentamos algunos inconvenientes que se dieron con los permisos, con el traslado de productores y otros. La situación económica producto de la inflación nos afectó bastante; el flete nos está costando bastante caro, hay poco consumo y eso es lo que más nos afecta. Eso provoca que nos compren a muy bajo precio”.
En ese sentido, detalló que “en este momento por la banana nos pagan entre 10 y 12 pesos el kilo en chacra, lo que implica que por un cajón de 25 kg de la fruta recibimos entre 250 y 350 pesos”.
A esos inconvenientes se le suma: “El bajo rinde en algunos cultivos por la sequía e incendios del año pasado, lo que ronda entre un 40 y 50%. El quebranto que tiene el productor en cuanto a la rentabilidad sobre si va a vender o no, y si lo hace, siempre es a un precio muy irrisorio. Los problemas al momento de trasladar la producción y a nuestra gente, aunque cumplimos con los protocolos establecidos. Tuvimos muchos productores, familias enteras que se han contagiado, embaladores de nuestra fruta, cuadrillas enteras contagiadas; tuvimos la desgracia de perder a un vecino que trasladaba nuestra fruta a Formosa, por ello pedimos al Gobierno provincial que este segmento de productores y de gente que comercializa nuestra producción -unos 120 en toda la provincia- sean incluidos en la lista para vacunarlos. Aún esperamos respuesta”, dijo Ayala.
En lo que hace a la producción de mandioca, batata, verdeo y zapallito de tronco, comentó que este último no tiene hoy salida porque no hay pedidos en el mercado local y en lo que hace a la batata “casi no se consume”. Ocurre que “son productos que se pierden si sigue la humedad o no hay ventas, al igual que la banana”, consignó.
Cooperativa
En otro orden de cosas, señaló que recientemente constituyeron una cooperativa como herramienta comercial. Se trata de un grupo de productores de la zona norte de la provincia.
“El mercado en el país está deprimido, hay mucha fruta extranjera que ingresa y nos preocupa. Hay normativas del SENASA como la prohibición del ingreso de banana extranjera a la provincia. Se trata de una cuestión sanitaria pero de todas maneras circula y se comercializa, sin control ni inconvenientes, y cuando nosotros queremos sacar la producción fuera de la provincia nos encontramos con muchos problemas como le pasó a un algodonero en El Colorado y con el tema banana con una disposición de AFIP-SENASA que establece que el DTVe que salió para la banana y que debería aplicarse a los 90 días después de su promulgación -que fue el 9 de abril- es exigido ya cuando no debería ser aún aplicado”, denunció.
Finalmente, el referente agrario enfatizó que “en 20 años, sin importar el Gobierno nacional de turno o el provincial que fue el mismo, no pudieron determinar una política que nos favorezca, por eso en cada década desaparecieron cerca de 100 mil pequeños productores a nivel país y entre ellos muchos son formoseños”.