El economista Damián Di Pace, titular de la Consultora Focus Market, señaló a La Mañana que el salario real tuvo durante los últimos cuatro años una pérdida del poder adquisitivo que se ubicó en un 20%. “A la mayoría de los argentinos les cuesta adquirir la misma canasta de bienes y servicios para no ubicarse por debajo de la línea de pobreza y de la línea de indigencia”, precisó.
También, el profesional dijo que los aumentos registrados en los valores finales de los artículos vinculados con la tecnología incrementaron la “brecha” existente entre quienes pueden adquirir esos productos y aquellas personas a las cuales esos bienes les resultan inaccesibles.
“Cuando baja el salario, en un mundo ‘tecnologizado’, el acceso a los bienes tecnológicos y a servicios relacionados con la tecnología, que están ‘dolarizados’, resulta más difícil. De este modo, se precariza la calidad de vida de muchas personas que no pueden reponer equipos básicos del hogar o acceder a servicios que dependen del costo de la divisa norteamericana, debido a que su poder adquisitivo en pesos está cayendo fuertemente”, explicó Di Pace a este diario.
Por otro lado, el licenciado expresó que la Argentina sufrió una fuerte caída del poder adquisitivo del peso argentino, como consecuencia de la devaluación y de la desconfianza que se generó en los últimos años en torno a los planes que se implementaron a nivel nacional y que fueron poco estables desde el punto de vista macroeconómico.
Asimismo, el experto advirtió que la incertidumbre que genera la Argentina hacia el exterior también afecta a diversos sectores dentro del territorio nacional. “Cayeron los incentivos para la inversión, la producción y la generación de empleo”, alertó.
Por último, Damián Di Pace expuso que además de la caída del poder adquisitivo, se registró en el país un aumento de los niveles de precarización laboral, por lo cual “cada vez más personas pasan a ser monotributistas o trabajadores autónomos, o pierden su trabajo”; y acotó: “Esto fue manifestado por el propio Instituto Nacional de Estadística y Censos: en el cuarto trimestre del 2019, el desempleo era del 8,9%, y en el cuarto trimestre del 2020, subió al 11%”.
ATE: la Canasta supera los $ 88 mil
De acuerdo a un estudio realizado por la Comisión Interna de la Asociación de Trabajadores del Estado en el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), una familia tipo necesitó en febrero más de cuatro Salarios Mínimos, Vitales y Móviles para poder vivir con dignidad.
El estudio asegura que la Canasta familiar alcanzó en febrero los $ 88.729, cuando el salario mínimo se ubicó en $ 21.600. El cálculo se realizó sobre la base de la evolución de precios de bienes y servicios que surgen de datos oficiales del organismo para una pareja con dos hijos en edad escolar.
Si bien oficialmente se considera la Canasta Básica Total como la referencia formal de lo que necesita una familia tipo para vivir, los trabajadores del INDEC realizan un cálculo de lo que califican como una “Canasta de Consumos Mínimos” equivalente a lo que se conoce como la Canasta Familiar y que incluye otros bienes y servicios omitidos en la Canasta Básica Total (CBT) que mide la pobreza y que está situada en $ 58.720 según los datos oficiales del INDEC.