Tras ser consultado por La Mañana acerca de los pasos a seguir si se registra un caso positivo de coronavirus en algún establecimiento educativo en el marco del regreso de las clases presenciales, el ministro de Cultura y Educación de la Provincia, Alberto Zorrilla, afirmó que el Protocolo vigente es el que se implementó el año pasado, donde “se expresa claramente que las escuelas tienen vínculo fluido con el área programática y con el Centro de Salud al que corresponden”.
En este sentido, el funcionario indicó que si en una institución se observa a “alguna persona” que pueda ser caso sospechoso o que tenga un PCR positivo, se tiene que comunicar el hecho al área de Salud, que “expresará las medidas que se desarrollarán”.
“Las escuelas no son centros de salud. Entonces, nos apoyamos en los compañeros del área específica para que ellos nos indiquen qué tenemos que hacer”, acotó.
“Los maestros, como cualquier otro habitante de la provincia, están en riesgo de recibir el virus, si es que no adoptan los criterios que tienen que tener de distanciamiento, al igual que los demás consejos que los médicos brindan permanentemente”, agregó.
Más adelante, ante otra consulta efectuada por la prensa, Zorrilla detalló que este año hubo una “ampliación” del Protocolo establecido en 2020, contemplando algunos aspectos nuevos, y aclaró que no se dispuso el regreso de los transportes escolares debido a que esa actividad representa “uno de los principales” puntos de contagio, al igual que la aglomeración de alumnos y alumnas.
A su vez, el médico infectólogo Julián Bibolini comentó que varios estudios en diferentes partes del mundo demostraron que en el caso de la actividad en las escuelas de Nivel Primario y Secundario, cuando se cumplen los Protocolos, la mayoría de los brotes no ocurren dentro de las instituciones por la mera participación de los alumnos en el lugar, sino en los domicilios, y que los casos positivos se registraron en adultos.
Los niños “no transmiten la infección tan fácilmente como los adultos”
Asimismo, el profesional remarcó que los niños “no transmiten la infección tan fácilmente como los adultos”, debido a que “tienen menor transmisibilidad hacia el resto de las personas”.
“Por ello, no se contraindica el inicio de las clases. Como en todo evento en un contexto de pandemia, siempre hay que realizar un seguimiento y elaborar protocolos. Siempre habrá muchas preguntas relacionadas con este tema, pero no se va a dejar de trabajar. Si hay alguna situación particular que conlleve un brote determinado, se intervendrá y se hará el ‘bloqueo’”, aseveró Bibolini.
Por su parte, la infectóloga pediatra Alejandra Bontcheff, responsable del área de seguimiento de vacunación del Ministerio de Desarrollo Humano, declaró que de acuerdo a los estudios realizados en Gran Bretaña y en otros países, los niños “no son grandes contagiadores” y padecen la enfermedad “en forma asintomática y con una baja carga viral”, por lo cual, generalmente, “el contagio se produce del adulto al niño”.
También, señaló que el haber padecido COVID-19 no contraindica la vacunación, por lo cual aquella persona que tuvo el virus puede acceder a la inmunización una vez que reciba el alta clínica, no tenga síntomas y disponga de estudios con resultado negativo.
“Por más que los docentes comiencen a vacunarse, se tienen que mantener las medidas de distanciamiento, higiene de manos y uso de barbijo, y no hay que compartir elementos. Eso va a evitar que haya contagios”, manifestó.