El defensor del Pueblo de la provincia, José Leonardo Gialluca, informó que a las 20:25 horas de este viernes, y tras una serie de reuniones de trabajo y de mediación, el grupo de originarios, especialmente mujeres, que se encontraban sobre la cinta asfáltica de la ruta nacional Nº 11, se retiró del lugar y liberó el tránsito a todo tipo de vehículos, quitando las ramas, alambres y demás obstáculos que se habían colocado para impedir el libre tránsito en la misma.
También el funcionario señaló que, de ahora en más, durante este fin de semana y los días venideros, el organismo constitucional gestionará los pedidos efectuados por los manifestantes.
No obstante, el funcionario indicó que esta labor se desarrollará “dentro de las facultades y competencias que posee cada organismo o institución de la Provincia o a nivel municipal que deban otorgar una respuesta a las cuestiones citadas”, siempre “dentro de un tiempo razonable y prudencial, iniciándose las gestiones para las personas más vulnerables y que en este momento se encuentran en una situación apremiante”.
Esto se conoció luego de una reunión realizada en la sede de la Defensoría del Pueblo, en la que el defensor, José Leonardo Gialluca, acompañado por funcionarios del organismo constitucional, recibió a Carolina Silvestre y Cristaldo Ayala, voceros del grupo de personas que cortaban, hasta este viernes, la totalidad del tránsito sobre la ruta nacional Nº 11, a la altura del acceso al barrio Namqom.
En la ocasión, los manifestantes expresaron que acudieron a la medida de fuerza debido a que no reciben respuestas reales a diversos requerimientos, entre los que se cuentan el otorgamiento de parcelas a familias que lo necesitan, y que las cajas alimentarias lleguen a todos los que se encuentren en el listado correspondiente. En este marco, denunciaron que los miembros responsables de repartirlas, que pertenecen a la comunidad, no entregan las cajas a quienes corresponde.
Asimismo, se mencionó que otros reclamos se relacionan con el traslado a Bartolomé de las Casas de una docente MEMA que reside en el barrio y que desde hace diez años presta servicios en el jardín de infantes de la comunidad, quien a su vez tiene en el lugar su núcleo familiar, compuesto por la docente, su esposo y tres hijos. También se reclamó la colocación de garitas para la espera del transporte público sobre la ruta y la entrega de plantines para arborizar el núcleo urbano.
A continuación, los manifestantes expresaron que se tomó la decisión de cortar la ruta, dado que al enojo por falta de respuestas a sus diversas peticiones se sumó el hecho de que días atrás, personas desconocidas, en horas de la madrugada, utilizando una motosierra, cortaron el añoso árbol de un enorme simbolismo para los vecinos de la zona, tratándose del ejemplar arbóreo logrado de una hijuela del árbol en que se celebraron 90 matrimonios al momento de entregarse las primeras viviendas que fundaron el barrio Namqom y que era utilizado como lugar de reunión para las asambleas.
Habiéndose solicitado desde el Organismo de la Constitución una investigación sobre este indignante hecho, sin que a la fecha se tenga respuesta alguna que permita identificar a los responsables, Gialluca se comprometió a realizar las gestiones necesarias para la atención de las cuestiones referidas, estableciéndose de común acuerdo un orden de prioridades para el abordaje de las mismas.