Daniel “Tito” Romero, su pareja y su pequeño hijo de 4 años pudieron ingresar a Formosa el jueves por la tarde tras una orden judicial que, fundandose en la Convención sobre los Derechos del Niño, instó a las autoridades provinciales a permitir su ingreso a la provincia. En el centro de alojamiento ubicado en Gran Guardia, conoció al empresario y emprendedor Marcelo Ocampo, quien ya le ofreció trabajo.
“Nosotros veníamos desde Córdoba, estuvimos 18 días varados en medio de la ruta. Conocí a Marcelo en el centro de aislamiento y me ofreció trabajo para cuando salgamos de acá”, dijo “Tito” en contacto con La Mañana. Añadió que cuando salga del lugar, volverá a su vivienda ubicada en Mojón de Fierro.
“Cuando salga vamos a charlar y veremos donde trabajaré, estoy muy contento y emocionado”, expresó el joven a este matutino y agregó que, respecto a las condiciones de aislamiento “estamos mejor que en la calle, por lo menos tenemos un techo y eso lo más importante”.
Por su parte, Marcelo Ocampo reveló a este matutino su alegría ante la posibilidad de poder brindarle una ayuda a Tito y a su familia. “Me conmovió mucho su historia y la odisea que pasaron”, dijo a La Mañana Marcelo, su futuro empleador. Añadió que “al mirar a su hijo, me imaginé ver al mio y decidí ayudarlo”.
Gracias al ofrecimiento de Ocampo, Tito contará con una mejor calidad de vida al volver a la ciudad de Formosa. “Los ayude económicamente y también le ofrecí trabajo ya que me comentó que al salir no tenía nada para hacer”, comentó.