Por Washington

"Mínima alma mía, tierna y flotante, huésped y compañera de mi cuerpo, descenderás a esos parajes pálidos, rígidos y desnudos, donde habrás de renunciar a los juegos de antaño. Todavía un instante miremos juntos las riberas familiares, los objetos que sin duda no volveremos a ver...”. A fines de los años cuarenta del siglo pasado, la escritora francoestadounidense Marguerite Yourcenar emprendió la escritura de la novela histórica “Memorias de Adriano”, en cuyas páginas, el emperador romano discurre sobre su vida, el amor, la amistad, los triunfos bélicos, la poesía, la música, la paz… y aventura también una meditación sobre la muerte. Todo, a través de una extensa epístola dirigida a su nieto adoptivo y sucesor Marco Aurelio, luego de su hijo -también adoptivo- Antonio Pío. De esta manera, la autora nos permite ingresar a la interioridad de Adriano y a sus cavilaciones más íntimas, desde donde sentencia: “Tratemos de entrar en la muerte con los ojos abiertos”.

La humanidad toda ha hecho de la vida y la muerte la causa de sus más profundas reflexiones a lo largo de la historia: guerreros, emperadores, filósofos, profetas, predicadores, poetas… Acaso ninguno ha logrado dar con respuestas lo suficientemente ciertas que aporten algo de sosiego a nuestras largas horas de inquietud o desesperación. Contamos, eso sí, con la certeza de nuestro compromiso con los demás en este plano, con los desvalidos, con las causas justas ante la precariedad de la existencia, como bien nos decía Camus en su filosofía del absurdo.

Desde un abordaje emocional y comprometido con un norte colectivo, el proyecto educativo “Sentirás” presenta “VIDA”, un documental audiovisual con un matiz dramático de fuerte tratamiento con los valores y con la apuesta a una mirada resiliente de la existencia. Las Escuelas Especiales N° 1, 7 y 12 articulan un trabajo desde lo pedagógico y lo estético, esta vez con el Instituto Privado “General San Martín”, en el que se permiten explorar las sensaciones más profundas de sus estudiantes: sus filias, sus fobias, sus esperanzas, su mirada hacia el futuro, en un proceso de gestación donde su creatividad y el acompañamiento de la familia han oficiado de sostén indispensable para la concreción final del producto.

De la mano de los coordinadores de este proyecto integral, que nace con el objetivo de producir un espectáculo teatral -la profesora Patricia Quinteros (Escuela Especial N° 7), la profesora Carolina Paredes (Escuela Especial N° 1), el profesor Lucas Ramírez (Escuela Especial N° 12) y el profesor Roberto Cuellar (Instituto Privado “General San Martín”)-, los jóvenes se abren nuevamente al mundo en primera persona para tomar la voz y proponer un mensaje que nos edifique desde dentro hacia fuera, con antecedentes notables en puestas en escena, como “Bibosi en Motacú” (2016), “Sentirás” (2017), “Sentirás +” (2018) y “Mundo” (2019). Por las condiciones que impone la pandemia, el proyecto teatral este año viró hacia el formato audiovisual, lo que requirió una readaptación a la nueva forma de trabajo, no sólo de los estudiantes sino también por parte de sus docentes y las familias.

Al respecto, el profesor Lucas Ramírez dialogó con Cronopio y precisó la naturaleza de este trabajo conjunto, su fecha de estreno y revalorizó la importancia de la educación emocional en el ámbito escolar.

“VIDA” (Vivir Intensamente Dando Amor), cuyo estreno será el próximo viernes 23 de octubre a las 10 hs, a través de las páginas de Facebook del Departamento de Educación Especial y de las escuelas participantes, se estructura desde tres aristas generales que van tejiendo la trama: la Ficción y la Realidad, mediadas por el Arte, que les sirve de frontera.

Pero “VIDA” es algo más que un acrónimo; es una apuesta férrea al compromiso con el que tengo al lado, al crecimiento colectivo, a proyectar un sendero donde transitar sin atajos, pero con la seguridad de no desfallecer en el intento porque puedo contar con el otro, que es mi espejo, que soy yo mismo. La vida se proyecta de este modo, donde lo comunitario prima sobre el individualismo, donde la meritocracia es un concepto discorde, vetusto, que no suma, que atrasa, donde la tracción se hace más fuerte si viramos todos hacia la otredad, que no está tan lejos si lo pensamos. Este docudrama propone un aprendizaje indeleble para mirarnos dentro y mirar al mundo, para construirnos desde la vida… y entrar en la muerte, como Adriano, con los ojos abiertos.

-----------------------------------------------------------

¿De qué se trata esta propuesta pedagógica pero también artística?
- “La propuesta es integrada y parte desde el proyecto ‘Sentirás’, que tiene una vigencia de más de cinco años, donde las Escuelas Especiales N° 1, N° 7 y N° 12 suman este año al Instituto Privado ‘General San Martín’ para integrar este proyecto artístico y pedagógico en donde todos los años se trabajan contenidos curriculares específicos desde la escuela. Y en este año tan particular, se trabajó todo lo que sentían nuestros alumnos en estos espacios de aislamiento social y preventivo por la pandemia. Entonces encontramos, a través de los mensajes de WhatsApp, de videos, de fotografías… ese código o nueva forma de poder comunicarnos con la familia primeramente, y luego la familia lo hacía con el alumno, con resultados súper positivos, porque en realidad era la familia la que trabajaba entera y de ella recibíamos toda la respuesta”.

¿Qué mensaje se propone dar “VIDA” en cuanto a trabajo conjunto desde la aceptación y cooperación con el otro?
- “El mensaje parte ya desde el nombre. Nosotros aprendimos, trabajando con la discapacidad, que siempre tenemos que resaltar y buscar lo positivo. Y desde nuestra mirada docente, todo lo que sea positivo, por mínimo que sea, resaltarlo. Entonces, este año, con esta particularidad, qué mejor que ‘vida’ como mensaje artístico y humano. ‘VIDA’, como docudrama, nació y se gestó como una obra de teatro. Es una obra de teatro, está escrita como tal. Sólo que evolucionó a un audiovisual que se transformó en un docudrama con sus particularidades. Entonces, el mensaje es que a pesar de las dificultades, de las realidades difíciles, a pesar de que hay fuerzas que nos aplastan, que nos manchan, que nos ensucian, seguimos adelante con la fuerza que nos levanta, que nos empuja y que nos sostiene, esperanzados en llegar a la luz, en encontrar ese espacio donde podemos desarrollarnos y vivir sanamente hacia un futuro mejor para todos. ¿Y qué mejor muestra de eso que lo que está pasando hoy en día? Es decir, ¿cómo va a ser la vida después de este año, de esta pandemia, de este virus? Si no reflexionamos sobre eso, va a ser complicado. Pero tenemos que evolucionar y saber que la vida tiene que ser diferente para todos”.

¿Cómo fue el proceso de adaptación con los alumnos al pasar de un espectáculo teatral presencial a un formato audiovisual remoto?
- “Eso es algo que nosotros, como docentes, también aprendimos. Este año fue de aprendizaje para todos, porque ya desde el teatro, que es vivencial, es el convivio, el aquí y ahora, pasar a un medio virtual de comunicación fue muy difícil. Pero eso no nos detuvo. Teníamos el estímulo constante de nuestros alumnos por participar, por querer hacer cosas; y la familia, que los acompañaba. Y esa fue nuestra tarea: simplemente adaptarnos, cosa que nuestros alumnos con discapacidad hacen todos los días, desde que nacieron hasta ahora. Y nosotros hacemos ese ejercicio porque aprendimos de ellos, con ellos, a adaptarnos a lo que la realidad nos ofrece. Entonces, ¿por qué no transformarnos, reescribir, evolucionar, mantenernos en movimiento sin quedarnos encerrados sin hacer nada? Esa era nuestra mayor preocupación llegando a este tiempo del año en el cual siempre el proyecto ‘Sentirás’ presentaba un espectáculo teatral trabajado durante todo el año en ensayos vivenciales donde los chicos podían expresar con su cuerpo, sus emociones y su talento… y hoy en día los teníamos en sus casas. La familia fue uno de los pilares esenciales para que se pudiera transmitir lo que nosotros deseábamos y enviábamos a las casas para que los alumnos pudieran replicarlo a través de fotografías en un principio, donde los chicos mostraban sus sentimientos, sus emociones en cuanto a la realidad que estaban viviendo, cómo eran esas emociones en un espacio cerrado, en busca de la libertad constante de poder salir a la vereda, de poder ir a la escuela, que era lo que ellos más querían. Porque la escuela es un espacio de igualdad y convivencia con los demás compañeros que ellos anhelan tanto. Entonces comenzamos con la producción de fotografías en función de consignas bien marcadas, aprendimos nosotros primero para después transmitirles a los padres cómo queríamos que salgan esas fotografías, cómo debían colocar los celulares, la luz, la distancia… todo para lograr estos contenidos fotográficos que están expuestos en el docudrama”.

¿Qué particularidades presenta este docudrama en cuanto a la temática abordada?
- “‘VIDA’ consta de tres líneas que conviven entre sí: Ficción, Arte y Realidad. En cuanto a la Ficción, son dos seres que nacen y que están al acecho de las fuerzas, tanto buenas como malas, las fuerzas que nos aplastan, nos manchan, nos ensucian, en busca de las fuerzas que nos sostienen, nos limpian y nos levantan, siempre hacia adelante en busca de la luz a la que al final del camino vamos a llegar con toda la esperanza y a tener una vida mejor, a través del amor. Porque ‘VIDA’ es un juego de letras que significa ‘Vivir Intensamente Dando Amor’. Entonces, en esa ficción nosotros plasmamos eso que queríamos contar. Luego está el Arte, integrado por las fotografías que durante todo el año los chicos fueron tomándose en función de diferentes temáticas; y la Realidad, que consta de entrevistas a nuestros alumnos, preguntándoles acerca de qué es la vida, qué es el miedo, qué es la esperanza y, después de todo esto, qué va a ser la vida para nosotros o cómo va a ser. Y en su respuesta está la clave de la verdad, del amor y de lo que tenemos que mejorar como sociedad, para seguir adelante y tener una vida mejor para todos”.

Las emociones fuertes y profundas vuelven a ocupar el centro de la escena en este formato audiovisual. ¿Qué importancia le otorgás como docente a la educación emocional en una sociedad tan convulsionada como la que vivimos a diario?
- “Para nosotros, que somos profesores en Educación Artística en la Modalidad de Educación Especial, la educación emocional es el lenguaje diario, el lenguaje con el cual nosotros nos comunicamos. Estamos hablando de personas con discapacidad, de estudiantes con diferentes discapacidades. Entonces a partir de las emociones y sus capacidades, ellos pueden mostrarnos todos sus talentos, en lo cual nos igualamos, porque las emociones son lo que nos iguala a todos. Entonces se trata de un espacio de creación, de explorar talentos, de igualdad, de respeto, de solidaridad, algo tan difícil en este tiempo en el cual no nos pudimos encontrar y estar en ese espacio de convivencia. Pero aun así, logramos a través de este docudrama, retratar lo que nosotros vivimos como personas, porque esto nos atravesó a todos. Y las emociones que cada uno vivió también fueron muy parecidas: desde el miedo a la esperanza de saber que en algún momento esto tiene que parar. Y nosotros, a través del teatro, de las artes plásticas, de la danza, la música… encontramos un medio a través del cual los chicos son libres. Y cuando uno es libre, es feliz. Y es auténtico. Todo mejora: las relaciones, el respeto, la solidaridad. Creo que proyectamos eso: una educación a partir de la diversidad para aprender y enseñar con la mirada en la diversidad para una sociedad más justa. En este mes de octubre en que en Formosa celebramos el Mes de la Inclusión, esta es nuestra propuesta como lanzamiento que hicimos. Y ‘VIDA’ es un resultado de un trayecto educativo, artístico y emocional del cual estamos muy orgullosos. Así que vamos a hacer ver lo que hicimos este año con este equipo tan hermoso de casi ochenta personas que, si sumás las familias, se hacen infinitas”.