Con un 10 en su último examen el pasado viernes 18, la estudiante formoseña Emma Federica Araujo se graduó de trabajadora social en el Instituto Superior de Servicio Social “Remedios de Escalada” de la ciudad de Corrientes, constituyéndose así en la primera mujer trans que obtiene este título de grado en la región NEA.
En diálogo con La Mañana, la flamante trabajadora social se mostró “súper contenta” y reconoció que no esperaba tanto impacto. “Para mí es una emoción muy grande y un orgullo que me llamen desde Formosa”, dijo.
Emma debería haber dado su examen final hace un año, pero todo se dificultó por cuestiones de fechas para defender su tesis y se complicó aún más este año por la aparición de la pandemia del coronavirus.
Finalmente, y después de muchas fechas postergadas, pudo presentar de manera virtual su defensa de tesis el pasado viernes 18 y se recibió de trabajadora social con todos los honores: un 10 en su examen final.
Estuvo muy ansiosa y nerviosa en todos estos meses por la demora en concretarse el último final, y si bien la vía remota utilizada en el último paso para acceder al título era algo nuevo en su vida de estudiante, superó ampliamente el desafío.
Emma contó que se encuentra viviendo en un alquiler en Corrientes con su pareja y que realiza trabajos de peluquería para poder sustentarse; como la mayoría, atraviesa problemas económicos a raíz de la pandemia.
Antes de rendir su examen no quiso avisar a nadie y que apenas si preparaba un austero festejo en su casa. Pero una vez que se supo que había alcanzado el título anhelado, las felicitaciones de sus amigas no tardaron en llegar.
“Tenés un 10, aprobaste”, le dijeron del otro lado de la pantalla al final del examen, y comenzó a festejar.
Su tesis se enfocó en la salud mental. “Hice mis prácticas en el área de la salud mental. Nuestro tema era la organización familiar y la interacción social de familias con un miembro con padecimiento mental”, explicó.
Opinó que más allá de que sea “algo histórico, porque el hecho de que se reciba una travesti es algo extraordinario y fuera de la común, lo bueno es que podamos visibilizarlo”.
“Tenemos que salir del lado de la meritocracia, porque no todas pueden llegar al título, y debemos preguntarnos eso: por qué soy la primera en hacerlo en pleno siglo XXI”, ahondó.
Contó que en un breve debate que se generó tras su examen con los profesores, se preguntaron si era necesario difundir el hecho como la primer chica trans que se recibía, “si al fin y al cabo deberían reconocerme como mujer”.
En este punto, cree que eso sería una utopía, “porque eso sólo sucede en un mundo ideal, donde no es necesario resaltar tu identidad, porque es una cuestión que nos limita para todo. Por eso es necesario resaltar, porque debe ser un foco alarmante el por qué soy la primera chica trans que se recibe”, planteó.
“Nadie se cuestiona el hecho de por qué no hay travestis trabajando en la administración pública, en un kiosco, en una empresa, en el colegio, en instituciones o en las universidades, nadie se pregunta eso”, lamentó.
Finalmente, comentó que al recibirse tuvo presente a su madre, también trabajadora social, y adelantó que a partir de ahora armará su currículum, para entregarlo a organismos nacionales, porque “el decreto que sacó el presidente Alberto Fernández sobre el cupo del 1%, que nos da una garantía de acceso laboral”.
El decreto nacional
El Gobierno nacional estableció que al menos el 1% de los cargos del ámbito público nacional deberán ser ocupados “por personas travestis, transexuales y transgénero que reúnan las condiciones de idoneidad necesarias”, lo que fue celebrado por activistas y funcionarias, que definieron el hecho como “un día histórico” y calificaron la disposición como un reconocimiento del Estado frente “a tantos años de exclusión, discriminación y persecución”.
La medida, que fue tomada mediante el Decreto 721/2020 publicado el 4 de este mes en el Boletín Oficial, establece que abarca a cualquiera de las modalidades de contratación vigentes en el Estado.