Micaela junto a sus tres hijos menores de edad están viviendo desde el domingo a la intemperie en un sector interno del barrio Guadalupe. Quedó en la calle por no poder pagar al alquiler. En el desalojo sólo rescató un colchón de una plaza. Pocos vecinos del lugar la ayudan con agua caliente y comida.
En contacto con el cronista de La Mañana en Vivo, la joven madre de una nena y dos varones, contó que el domingo la desalojaron de su alquiler por la deuda que acumuló durante la cuarentena. Mencionó que el propietario se cobró la cuenta con sus pertenencias. “Sólo rescaté un colchoncito que me prestó un vecino del edificio”, dijo.
Desde el domingo a la noche, Micaela con sus tres criaturas están asentados precariamente a lado de un garaje, protegidos por una chapas y refugiados con una manta y sólo un colchón prestado, en cercanía a las calles Corrientes y Trinidad González, a metros de la comisaría del barrio.
“Nos bañamos cuando los vecinos nos ceden el baño. Y comemos también por ayudas que recibimos”, agregó.
Ante la crítica situación que está atravesando desde hace cuatro días, Micaela pidió colaboración y protección para sus hijos a las autoridades: “Vivimos con miedo. Estamos con un colchón de una plaza pasando la noche en un lugar donde hay mucha delincuencia cerca. No tenemos donde ir ni mucho menos dinero para alquiler en otro lugar por el momento. Con la ayuda del IFE salía a comprar y revender productos de limpieza por la calle, pero en esta situación no lo puedo seguir haciendo”, manifestó.