Tres policías resultaron heridos tras ser agredidos por un comerciante del barrio El Resguardo y su hijo, que se negaron a la clausura del local. La medida fue por permanecer con las puertas abiertas después del horario de cierre estipulado por la actual emergencia sanitaria según informaron fuentes policiales.
Ocurrió el lunes a las 21.30 cuando policías de la Brigada de Investigaciones de la Zona 2 del Comando Radioeléctrico pasaron por el frente de un kiosco ubicado sobre calle Pauzier al 1300 y advirtieron que estaba abierto al público, transgrediendo el horario límite establecido de las 20 horas.
Los policías conversaron con una mujer a quien se le hicieron saber la infracción en la que estaba incurso el local, solicitando en consecuencia la presencia de agentes de la Dirección de Bromatología Municipal.
Minutos después llegó un inspector que realizó el acta de infracción y clausura, pero cuando quiso colocar la faja respectiva, salió del interior de la vivienda un hombre que comenzó a insultar a los funcionarios presentes. No conforme con esto lanzó golpes de puño y patadas a los policías y tomó del cuello a uno de ellos, con quien se trenzó en una pelea.
Cuando los demás personas presentes trataron de separarlos y calmar los ánimos, apareció en escena el hijo del comerciante, quien se sumó a la agresión logrando golpear a otros policías según los datos brindados por la fuerza. Después, ambos ingresaron a la casa para evitar ser detenidos.
Por el caso, además de la clausura del comercio, se inició una causa judicial por los delitos de atentado, resistencia contra la autoridad, lesiones, daño e infracción al artículo 205 del Código Penal.
Los tres policías heridos fueron examinados por el forense se turno e iniciaron la demanda judicial contra los agresores.