Desde la Asociación de Remiseros de Formosa manifestaron que son frecuentes las situaciones “complejas” que suceden en los distintos controles policiales ubicados en varios puntos de la ciudad. Aseguran que “depende de la guardia, del control que te toca”.

En ese sentido, La Mañana dialogó con Hernán Mucherli, presidente de la asociación, quien manifestó que al grave problema que provoca intentar renovar habilitaciones del vehículo o de carnet de conducir, se le suman los “encontronazos” con los efectivos policiales.

“En mi caso, estoy renovando la habilitación de uno de mis vehículos y hace 35 días que estoy con los papeles. Esta situación es entendible, hace que se demore el trámite de renovación de ciertas cosas, pero también nos crea problemas y malas experiencias en los controles policiales”, inició diciendo.

“A un policía le expliqué las situaciones y que no tenía ciertos papeles porque están en trámite, tampoco puedo tener el auto parado treinta días por esas demoras. Pero hay situaciones que la Policía desconoce o no sé qué es lo que pasa”, expuso el referente de los remiseros.

Además, Mucherli denunció que han secuestrado vehículos con habilitaciones vencidas dentro de la cuarentena y se multó a personas con el registro vencido dentro de la cuarentena, y “las cosas no deberían ser así”.

En ese aspecto, contó una situación particular que vivió en un control ubicado en la avenida Diagonal del barrio Divino Niño (ex–La Colonia). “De entrada me hablaron mal y les dije que están haciendo un control por la pandemia y si no fuera por eso no estarían ahí. Deben hacer hincapié en los permisos, pero esto ya es un control exhaustivo de remiseros”, subrayó.

“Discutimos todo el tiempo con la Policía. En el Puente Blanco nos hacían abrir hasta el baúl del auto como si lleváramos droga, por lo que muchos decidimos no pasar más por ahí, porque los pasajeros se cansan de esperar”, manifestó y añadió que “la Policía debería asesorarse y después actuar”.

Por último, Mucherli señaló que “hay efectivos que tienen mucha buena voluntad, predisposición y nos tratan muy bien; pero a algunos se les va la mano a veces. Tuve un problema con un comisario que llegó a decirme que si no era porque estaba mi señora al lado mío, me llevaba de los pelos a la comisaría”.