CLORINDA (de n/agencia) - Durante una intensa jornada de tarea sanitaria, equipos de profesionales de la segunda ciudad y refuerzos de la capital de la provincia realizaron este sábado un total de 655 hisopados entre los vecinos del barrio El Porteño Norte, aislado preventivamente a partir de la detección de dos casos de COVID-19, buscando precisamente la detección de otros posibles en este sector de Clorinda.

Los profesionales de la salud resaltaron la colaboración demostrada por los vecinos, quienes se acercaron a los tres puntos establecidos para la realización de estas pruebas, siendo ellos: el Centro Integrador Comunitario con 266 tomas de muestras, la Capilla Virgen de la Medalla Milagrosa con 150 hisopados, y el Centro de Salud del Bº El Porteño con 199 tomas realizadas.

Personal Policial de la Subcomisaría del lugar acompañó el operativo que movilizó a móviles y personal, guardando todas las medidas de bioseguridad establecidas en el protocolo por el COVID-19.

En el marco de lo que fue este sábado la conferencia de prensa brindada por el Consejo de Atención Integral a la Emergencia COVID-19, el médico epidemiólogo Mario Romero Bruno informó a La Mañana que hubo ocho personas identificadas como contactos estrechos del transportista y la mujer, y todos dieron negativo en los análisis que se les realizaron. Pese a haber dado negativo, los contactos fueron trasladados a Formosa, donde se los alojó en un centro preventivo. “De acá en más, ya no hay contactos estrechos por esperar, queda sólo la búsqueda activa dentro de ese lugar”, señaló al hacer referencia a este barrio de Clorinda.

En El Porteño Norte residen unas 7 mil personas y lo recomendado en estos casos es testear al 10% para lograr una muestra.

Destacan acatamiento de los vecinos al aislamiento obligatorio

“Vemos las calles de la ciudad desiertas, síntoma evidente de que se está cumpliendo la medida de Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio a partir del retroceso a la Fase 1 de la Cuarentena por los casos detectados en El Porteño Norte”, expresó el comisario general Víctor Téllez, jefe de la UR-3 en diálogo con esta Corresponsalía de La Mañana.

“Eso es muy bueno para la salud de la población de Clorinda. Por eso es que quiero resaltar la conducta demostrada por la mayoría de la gente que decidió quedarse en su casa respetando esta nueva medida sanitaria. Vemos muy poco movimiento de personas y vehículos, y en este escenario, no registramos ningún hecho delictivo”, destacó Téllez.

Adelantó que “los controles en toda la ciudad seguirán hasta la fecha anunciada por el Consejo Provincial del COVID-19, es decir, el siete de agosto, por lo que aquellas personas afectadas a las habilitaciones esenciales deberán tener sus permisos actualizados de circulación para evitar posteriores molestias en estos controles”.

Fue intenso el abastecimiento a los aislados por casos de coronavirus

El límite entre el aislamiento sanitario y el resto de la ciudad de Clorinda está demarcado por las vallas de seguridad instaladas en el acceso al Bº El Porteño Norte. Hasta allí llegaban de manera constante los proveedores de elementos básicos que necesitan las familias del barrio aislado preventivamente desde el mediodía del jueves, al confirmarse dos casos positivos de COVID-19 y tratar de establecer posibles nexos de ambos contagiados.

El personal policial se encargó del control de que la entrega de las provisiones de elementos básicos -alimentos de primera necesidad, elementos de limpieza y medicinas- se realice resguardando los protocolos básicos para evitar lo menos posible el contacto entre las personas. Los vecinos del Porteño Norte y de El Porteñito por su cercanía, se manifestaron “sorprendidos” por la medida de aislamiento, pero al mismo tiempo aceptaron esta imposición que es en salvaguarda de los propios lugareños y del resto de la población de Clorinda.