Este jueves, en todo el país se emitió una protesta en pedido de una ley de Emergencia Hotelera – Gastronómica para salvar al sector, uno de los más afectados por el aislamiento y las medidas sanitarias.

La propuesta de la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la Argentina contempla diez aspectos principales. El primero es que el ATP sea para todas las empresas sin distinción de cantidad de empleados, hasta tanto se retome la actividad normal y habitual.

También reclaman la eliminación de todas las contribuciones patronales por el mismo período, reducción de tarifas de servicios públicos y créditos a tasa cero para capital de trabajo.

Por otra parte, necesitan una reducción del IVA al 10,5 por ciento y la exención de este impuesto al turismo nacional, además de tomar a cuenta de ganancias el gasto en turismo.

El sector pide también una amplia moratoria que incluya el pago de todas las deudas generadas hasta el momento de la reapertura y suspensión de las ejecuciones fiscales y la exención del impuesto a los créditos y débitos bancarios.

Finalmente, plantean la eliminación de las comisiones de tarjetas de crédito por 12 meses luego de la apertura.

Ojeda: “Estamos atravesando una situación angustiante”

El presidente de la FEHGRA Formosa, Ronny Ojeda, aseguró a La Mañana que la manifestación se debió a que la situación del sector es “crítica” y “angustiante”.

“Sabemos que no son tiempos fáciles, priorizamos la salud, pero creemos que también hay situaciones alarmantes, como los costos fijos que tenemos. Es mucho tiempo de inactividad; son más de 100 días en Formosa, y muchos nos referimos a esta situación como terminal”, declaró.

Señaló que hubo muchos cierres definitivos de locales del rubro en la provincia y el impacto fue “muy negativo, siendo que somos un sector que da mucho trabajo genuino. Eso va a repercutir. Preservamos las fuentes de trabajo, mantenemos a lo más importante que tenemos, que son nuestros colaboradores; pero tenemos que hacer que después de esta pandemia, los empleadores sigamos en pie”.

Resistir

Adriana Maggioni, propietaria de la tradicional cafetería Il Viale, coincidió con Ojeda en calificar a la situación como “crítica”, y es por esto que se está solicitando un auxilio para el sector.

“Si bien nos adaptamos para trabajar con el delivery, lamentablemente no alcanza y, a medida que va pasando el tiempo, se hace muy difícil sostener y afrontar todos los gastos que implica un negocio en marcha”, dijo a La Mañana.

Consultada sobre lo que vislumbra de acá a fin de año, eligió tener “esperanza en que se pueda habilitar la actividad conforme protocolo COVID-19, según lo que vemos que ya están haciendo en otros lugares”.

“Evidentemente hay una 'nueva normalidad' a la cual vamos a tener que adaptarnos, ser responsables y así poder trabajar con tranquilidad, tanto como para nuestros empleados como para los clientes”, continuó.

Sin embargo, consideró fundamental poder contar con ayuda del Gobierno, “justamente lo que se está pidiendo con la ley de Emergencia”.

Por su parte, una empresaria gastronómica calificó a la situación como “injusta” y comentó a La Mañana que lo que define a su empresa es la resiliencia.

“En nuestra empresa estamos viviendo esta situación con gran templanza. Toda situación de injusticia afecta a la persona en todos los aspectos: emocional, económico…”, dijo sobre cómo está viviendo estos días.