El voley formoseño sufrió un duro golpe tras el fallecimiento de Fabián Eduardo Montenegro, árbitro y pieza fundamental en el crecimiento de esta disciplina en la provincia.

El también profesor de educación física, de 52 años, tenía cáncer en el duodeno y estuvo internado los últimos días en el Sanatorio Formosa. Durante la jornada de martes, “Monte” fue intervenido quirúrgicamente para ponerle un stent, pero más tarde sufriría una descompensación que le ocasionó la muerte.

Zulema Jentile, presidenta de la Federación Formoseña de Voleibol, dialogó ayer con Ovación Radio y recordó de gran manera a Montenegro: “Fabián era una persona con la que no podías estar mal. Siempre tenía la palabra exacta para levantarte el ánimo. Cuando comuniqué al grupo de FeVA su deceso, dejó una sensación muy triste porque fue un hombre muy correcto”.

Y siguió: “Quedaron todos muy mal porque era una persona sin conflictos que se adaptaba a cualquier situación, resolvía muy bien todo lo referido al arbitraje. Solía tener encuentros muy ásperos en Liga y supo sobrellevar el momento; la verdad que deja un vacío muy grande en el voley argentino”.

Además de impartir justicia, Montenegro estaba a cargo de la Secretaría de Árbitros de la FFV y era todo un referente dentro del organismo, colaborando hasta con la Asociación Capitalina de Voley.

Jentile admitió que todavía está “tratando de sobrellevar esta noticia”, ya que en julio también se cumplirá un nuevo aniversario -el tercero- del fallecimiento del entrenador Rodolfo Leguizamón. “Hoy -por ayer- nos tocó despedir a su amigo. No podemos creer todavía lo que pasó”, se lamentó y cerró la dirigente.