Los 269 kilos de cocaína secuestrados entre el miércoles a la siesta y el jueves a la madrugada por la Aduana de Clorinda fueron valuados en 283 millones de pesos y constituyó el golpe más duro asestado al narcotráfico en lo que va del año en nuestra provincia.

Los operativos fueron realizados por agentes de la Aduana apostados en el cruce fronterizo San Ignacio de Loyola, que une a la ciudad de Clorinda con Paraguay.

Fueron tres los camiones de la misma empresa paraguaya que cruzaron por ese lugar transportando carne congelada con destino a Chile. Los dos primeros sortearon el control sin problemas y recién el tercero fue detectado con la droga que estaba llevando, un total de 135 kilos de cocaína distribuidos en panes prolijamente acondicionados con papel de aluminio.

Esto alertó a las autoridades aduaneras y permitió horas después encontrar el segundo camión, que había sido abandonado por el chofer y su acompañante en una estación de servicios de la localidad de Lucio V. Mansilla, probablemente tras tomar conocimiento de que uno de los transportes había sido descubierto en el control del puente Loyola.

Esta unidad llevaba 134 kilos de cocaína. En ambos procedimientos hizo un total de 269 kilos de la misma droga, valuada en 283 millones de pesos.

Respecto al tercer camión, éste fue retenido en el control de Gendarmería de la localidad de Florencia, en la provincia de Santa Fe, pero según se informó no llevaba ninguna carga ilegal.

Fuentes cercanas a la investigación dijeron a La Mañana que la empresa paraguaya que es dueña de estos camiones y de la carne que exportan a Chile realiza por lo menos 20 envíos al mes al país trasandino.

La droga secuestrada estaba acondicionada debajo del piso y entre las paredes de las cámaras frigoríficas, lo que dificultó enormemente poder detectarla, incluso para el escáner.

Algunos de los paquetes tenían la fotografía de John Gotti, uno de los mafiosos más reconocidos en la historia del hampa de Estados Unidos, y otros sólo llevaban sus iniciales. Este dato no pasó inadvertido para las autoridades aduaneras y judiciales, confirmando las sospechas sobre el nivel de organización que tiene esta banda delictiva de alcance internacional.

Además del secuestro de los dos cargamentos de droga, también incautaron los camiones y detuvieron al chofer y al acompañante de una de las unidades, en tanto otros dos se encuentran prófugos.

Benítez: “Estamos ante una organización narco de gran entidad”

En declaraciones a La Mañana, el fiscal Federal Luis Benítez destacó la importancia del duro golpe asestado a esta organización delictiva trasnacional dedicada al transporte de drogas a países vecinos, como paso previo a su posterior envío a los grandes centros de consumo en Europa.

Dijo que se trata de una empresa delictiva de gran envergadura, no solamente por el valor económico de la droga secuestrada, sino por toda la logística y la tecnología utilizada para el acondicionamiento del estupefaciente, casi imperceptible para el escáner.

El funcionario judicial dijo que se puso en marcha una exhaustiva investigación con los Ministerios Públicos de Paraguay y Chile, de manera coordinada y en forma cooperativa, poniendo el foco en el itinerario y movimiento de esta empresa que exporta carne congelada a Chile.

“Fue de gran ayuda el perro antinarcóticos que tiene Aduana y la revisión por imagen a través del escáner”, subrayó Benítez, quien valoró el trabajo desplegado por funcionarios y agentes del organismo nacional de control.