Esta mañana, un grupo de afiliados del PAMI se encontró con la sorpresa de que la delegación local estaba cerrada y que nadie respondía al número de teléfono que dejaron para consultas y trámites. El móvil de La Mañana en Vivo habló con dos abuelas que necesitaban gestionar sus recetas para autorizar medicamentos en farmacias. Una de ellas llegó de Misión Laishí con problemas respiratorios y la urgencia de conseguir órdenes para realizarse estudios médicos en la ciudad.
Después de insistir con varias llamadas al número de teléfono que pegaron en la persiana cerrada del Pami, Timotea habló con el cronista de La Mañana en Vivo: “Vine a autorizar unos papeles para retirar remedios de mi madre que tiene que tomar; y sin embargo me encuentro con que está cerrado y nadie atiende al número que dejaron. Encima que estamos en una situación difícil por la pandemia y tenemos las recomendaciones de salir lo necesario, nadie da respuestas. Cuando tendrían que agilizar los trámites, lo complican”, manifestó.
Desde el mismo lugar, una afiliada de 67 años que llegó de Misión Laishí con un permiso especial del Hospital por problemas respiratorios, acompañada por un familiar, contó en el aire de La Mañana en Vivo que no logró comunicarse con un operador de la delegación para que le den respuestas sobre una autorización de estudios y remedios que necesita con urgencia.
“Tengo las recetas agotadas y los medicamentos se me terminan este fin de semana. Teniendo en cuenta que estamos en cuarentena, mi preocupación es de dónde voy a conseguir los que necesito si no me autorizan. En mi pueblo sólo me pueden atender con oxígeno y el médico de cabecera sólo firma recetas. Nada más”, explicó Blanca.
Y añadió: “Salimos con un permiso especial desde Laishí por esta urgencia de mi enfermedad y resulta que nadie nos atiende. Es todo un sacrificio movilizarse desde allá. Seguiremos insistiendo al número que pusieron en el papel pero hasta ahora nadie atiende. Suena y suena pero nada”.