El Grand Prix de Mendoza contó con la participación de más de 300 jugadores y se realizó en el estadio Vicente Polimeni, de la localidad de Las Heras, Mendoza, bajo la organización de la Federación Argentina de Tenis de Mesa.

Allí estuvo Magdalena Villalba, que logró obtener el tercer puesto en la categoría Sub 15 y también se llevó ese premio en la división Sub 18. En Sub 15, el primer lugar quedó en manos de Manuela Pereyra de Río Negro; segunda fue Victoria Loncharich de Mendoza; y terceras Candela Sanchi de Mendoza y Magdalena Villalba de Formosa.

En tanto que en Sub 18, el podio tuvo en el lugar más alto a Florencia Chirino de Mendoza; escoltada por Manuela Pereyra de Río Negro; y terceras Magdalena Villalba de Formosa y Martina Kurchan de Fetemba.

Ya de regreso a Formosa, Villalba visitó ayer Ovación Radio -FM VIVA 102.3-, donde habló de esta competencia que tuvo en Mendoza y también de lo que viene, que incluye el gran desafío en Lima, Perú.

Sobre el torneo en Las Heras, dejó ver que pretendía algo más, lo que muestra su nivel de exigencia: “Se cumplieron con las expectativas. Me hubiera gustado llegar a más. Comencé a entrenar en enero, fui a Córdoba, en mi club estamos entrenando cuatro horas y media doble turno todos los días, así que me preparé muy bien”.

Sobre la competencia que encontró, marcó que “a algunas rivales ya las conocía, a otras las conocía pero nunca las había enfrentado. Lo mejor es conocerlas porque si no, no sabemos muy bien cómo juegan. Íbamos a las 9 de la mañana y volvíamos a las 21 al estadio. Algunos partidos duraban casi una hora y más o menos fueron unos cinco partidos por día, con algunas esperas largas también: me tocó esperar 7 horas para volver a jugar un día”.

Más allá de los dos podios, el torneo sirvió para autoevaluarse: “Mejoré mucho en relación al año pasado. Me dijeron eso otros entrenadores, pero, como siempre, faltan cosas por arreglar. Esta vez fui sin entrenador, depende de cada uno si es más fácil o difícil tener uno. Algunos se ponen nerviosos cuando están solos o no saben qué hacer, pero antes me pasaba que yo dependía todo el tiempo de mi entrenador, pero ahora ya me manejé más sola, y así llegué al podio y estaba sola, con mi abuela desde la tribuna festejando”.

Se refirió a sus objetivos para este año: “En marzo voy a Perú con los chicos y chicas de la selección argentina y espero que ahí nos vaya bien. Es un honor representar al país en algo que te gusta. Antes no pensaba que iba a ser todo tan rápido, pero acá estamos. Es el 9 de marzo, es un circuito mundial de cadetes, ya asistí a uno en el 2018 que se hizo en Paraguay. Esa vez yo era más chiquita y me dejó una buena experiencia, porque estuve con gente de muchos países, algunos que eran de Europa, Asia, así que ya sé más o menos cómo es. También espero que me vaya bien en el Nacional que se hace acá en Formosa por primera vez, para representar bien a la provincia. Se va a hacer en las vacaciones de invierno”.

Continuando con su preparación para lo que viene, anunció: “Este fin de semana viene Walter Gómez, un entrenador de Paraguay, que es uno de los mejores de Latinoamérica y nos ayuda a entrenar. Tiene mucha paciencia y nos enseña lo importante”.

Y justamente en la idea de mejorar a futuro sabe dónde hay que apuntar: “Siempre lo técnico, que lo mejoré pero hay cosas que tengo que mejorar un poco más; y la cabeza, porque hay momentos que son críticos y me pongo nerviosa, pero de a poco lo estoy aprendiendo a manejar. Lo principal es respirar hondo, o lo que se puede hacer en este deporte es que cada múltiplo de 6 podés parar, agarrar tu toalla y estar un ratito pensando; y hasta ahora eso es lo que yo hago y la mayoría de las veces me funciona”.